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Título original: They game to Baghdad.
Traducción: C. Peraire del Molino
Saga:
Género: narrativa/adulto/ficción/espionaje/misterio/política/arqueología/romance.
Tapa: blanda
Editorial: Molino.
Año de publicación: 1951. Edición: 1989.
Páginas: 240.
Autoconclusivo:
Sinopsis editorial: Victoria se enamora del joven Edward que ha de marchar a Bagdad y se las ingenia para seguirle como señorita de compañía de una anciana, fingiéndose sobrina de un arqueólogo. En Bagdad la trama romántica se complica con aventuras peligrosas.
Premios:
Adaptación cinematográfica:
* Reseña sin epoilers ✅
Victoria, una joven que trabaja como mecanógrafa con una desbordante imaginación acompañada de una afilada lengua hacen que pierda el empleo. Ese mismo día conoce a un joven en un parque, Edward, un joven librero y se produce el flechazo entre ambos. Desafortunadamente Edward debe viajar a Bagdad con un cargamento de libros por encargo de su jefe. Victoria en su desesperación decide seguirlo. A partir de ahí todos sus esfuerzos se basan en buscar un empleo que le permita pagarse un pasaje a Bagdad y encontrarse con Edward. Parece que la suerte está de su lado. Un día llega a sus oídos la feliz noticia de que una anciana, la señora Clipp, desea viajar a Bagdad y tiene que hacerlo sola, por lo que solicita una chica que la acompañe. Corriendo los gastos del pasaje por cuenta de la anciana, Victoria no deja pasar la oportunidad. Una vez en Bagdad su mayor preocupación será encontrar a Edward. Hasta que encuentra un hombre herido de muerte en su habitación de hotel. Se ha colado por el balcón huyendo de sus perseguidores, y susurra a Victoria unas enigmáticas palabras antes de morir. Con este misterioso hombre que muere sobre la cama de Victoria, comienzan una serie de acontecimientos que harán que el objetivo de la chica pase a segundo plano. Se verá inmersa en un entramado plagado de espías, intrigas, política, asesinatos, secuestros y mentiras.
¿Conseguirá Victoria salir del embrollo y encontrar la felicidad junto a Edward?
Intriga en Bagdad es una historia de espionaje, por ello no cuenta con los investigadores habituales, sino con Victoria una chica fresca y simpática, aunque un poco lianta con la capacidad que posee para inventar historias y mentiras. Como suele ser habitual durante el desarrollo de la historia Agatha va plantando semillas falsas para confundir y hacer sacar mil teorías y aunque la novela pueda parecer compleja por la cantidad de situaciones, personajes ideas y sucesos siempre va dirigiendo al lector, haciéndole recordar el objeto, persona o situación clave para que al menos la trama principal y su resolución queden entendida y explicada.
»Da una sensación de... Grandeza. ¿Cómo dice aquella poesía: Cuando tu eras rey de Babilonia y yo esclava cristiana...? Tal vez lo hayamos sido.»
La estructura narrativa se divide en 25 capítulos de extensión corta narrados en tercera persona. Con un estilo ágil, aunque el principio es algo lento. La historia en general es atrapante, pero los primeros capítulos demasiado pesados, y también desorganizados, se narra desde el punto de distintos personajes que no tienen relación entre sí. Aunque más adelante la trama se centra únicamente en Victoria. Los personajes secundarios están construidos en profundidad de tal forma que todos son congruentes en su forma de actuar, a excepción del antagonista. Sus motivaciones y trasfondo son confusas y brevemente explicadas, que no terminan de entenderse y parece quedar en el aire algunas cuestiones.
Es una obra particular, porque es una de las pocas que el tema trasciende y se observa de una forma más o menos directa. Se trata la preocupación del mundo occidental de la guerra fría, de la guerra nuclear y los problemas de entendimiento entre capitalismo y comunismo. Otra temática que se trata es la vida del arqueólogo, que la autora logra capturar con realismo por sus circunstancias personales.
En definitiva, Intriga en Bagdad es una novela coherente aunque no perfecta, con un trasfondo muy fresco en el que la autora da rienda a toda su capacidad literaria.
Torquay, (1891-1976). Agatha Christie, novelista y dramaturga, ha sido considerada como una de las grandes escritoras del género detectivesco. La estructura de sus tramas, basada en la tradición del enigma por descubrir, es siempre similar, y su desarrollo está en función de la observación psicológica. Con el seudónimo de Mary Westmacott creó varias novelas de corte más psicológico. Agatha Christie fue también una autora teatral de éxito, con obras como La ratonera o Testigo de cargo. La primera, estrenada en 1952, se representó en Londres ininterrumpidamente durante más de veinticinco años, y la segunda fue llevada al cine en 1957 en una magnífica versión dirigida por Billy Wilder.
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| 7/10 |
¡Nos leemos! 😉
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| Lecturas de otoño. |
Sobre la autora:
Torquay, (1891-1976). Agatha Christie, novelista y dramaturga, ha sido considerada como una de las grandes escritoras del género detectivesco. La estructura de sus tramas, basada en la tradición del enigma por descubrir, es siempre similar, y su desarrollo está en función de la observación psicológica. Con el seudónimo de Mary Westmacott creó varias novelas de corte más psicológico. Agatha Christie fue también una autora teatral de éxito, con obras como La ratonera o Testigo de cargo. La primera, estrenada en 1952, se representó en Londres ininterrumpidamente durante más de veinticinco años, y la segunda fue llevada al cine en 1957 en una magnífica versión dirigida por Billy Wilder.
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