1ª TEMPORADA
1x1: EL MISTERIO DE LA HABITACIÓN SELLADA
Caso:
Lidia, la forense les hace saber a Gerardo, Laura y Martín que Emilio fue asesinado. Le clavaron en el cuello una herramienta que se utiliza en los invernaderos. La herida que le dejo en el cuello es muy pequeña. Y han tardado en encontrarla. Con esta información Laura ya tiene a un sospechoso. Ella y Martín van al restaurante donde el abogado está comiendo con Inés, la socia, que ahora es la propietaria de la empresa. Parece que ella y Martín se atraen. Laura le comenta al abogado que después del crimen, se dio cuenta que tenía los ojos rojos, como si hubiera sufrido una alergia repentina. Le pregunta si en el momento del crimen estaba en el invernadero con alguien. Este sigue manteniendo que se encontraba en la biblioteca. Laura le pide a Martín que la acompañe a ver a la mujer de la víctima, se ve que tiene una cuartada para el momento del crimen. Él le dice que no puede porque tiene recados que hacer. Así que va Laura sola. La mujer le cuenta que en el momento del crimen estaba en el invernadero con el abogado. Le hace saber que ella no era la única que tenía amantes. Emilio también las tenía. Laura le pregunta si su marido se veía con alguna mujer antes de su muerte. Ella le responde que cree que no, porque con la última amante que tuvo lo paso fatal para dejarla, ya que ella no quería romper la relación. Laura le pregunta cuando la dejo, la mujer le dice que fue el 22 de febrero. Lo sabe, porque al día siguiente se lo conto todo. Laura se da cuenta de que justo después de esta fecha, fue cuando Emilio empezó a recibir las amenazas. Está convencida de que las amenazas las enviaba la amante, y que esta es Inés, la socia. Va a su casa, hablar con ella. La chica le dice que ahora no la puede atender, porque se iba a dar un baño. Igualmente Laura entra. Y en ese momento escucha una voz de hombre, que le resulta familiar, que proviene del baño. Laura va para allá, y se encuentra con Martín metido en la bañera. Laura se marcha de allí sin decir nada. Más tarde, cuando Martín regresa a comisaria, le echa la bronca por mantener relaciones con una sospechosa. Martín le dice que no entiende porque se pone así, teniendo en cuenta que no es la primera vez que lo hace. Esto lo escucha Lidia. Laura vuelve a visitar a Inés y sin rodeos le pregunta si ella y su socio eran amantes. Esta le responde que no. Es más le dice que lo quería ver muerto, porque Emilio estaba llevando la empresa a la ruina. Inés le da a Laura la agenda personal y las cuentas de Emilio, para a ver si les ayuda a encontrar a la misteriosa amante. Laura, Martín y Cuevas (policía informático) lo repasan todo y encuentran un pago de un peaje. Martín les dice que esa carretera lleva a unos hoteles muy discretos que hay en la Sierra. El y Laura van para allá. Mientras Martín y Laura hablan con en el recepcionista, en una de las habitaciones, hay alguien buscando algo. Laura le enseña una foto de Emilio y le pregunta si lo reconoce. Este le dice que sí, que venía con frecuencia por aquí con una mujer. Martín le pide si se la podría describir, el hombre le responde que nunca la vio bien, porque esperaba fuera, pero siempre antes de entrar se quitaba la alianza de casada. Laura le pide si les podría enseñar la habitación donde se veían. Van acompañados por la señora de la limpieza. Esta se da cuenta de que hay cosas que no están en su sitio. Les explica que la última vez que vinieron tuvieron una pelea muy fuerte. El la quería dejar y ella se negaba. Laura se da cuenta de que la señora de la limpieza oculta algo en el bolsillo de su uniforme y le pide que se lo enseñe. Es el anillo de la amante, Laura lo reconoce. La mujer le explica que se lo encontró, al día siguiente de que se fueran. Cuando Martín y Laura regresan del hotel, Gerardo les dice que han detenido a Inés, han encontrado el arma del crimen en su casa.
Por la noche Laura está en casa preparando
la cena, con Gerardo y Martín. Los gemelos le preguntan si pueden ir a jugar a
la calle, ella les dice que no porque pronto van a cenar, estos siguen mirando
la tele. A pesar de que el caso está resuelto Laura no se muestra conforme, le
enseña a su jefe el menú que Emilio y su amante pedían cuando se veían en el
hotel. Está compuesto por dulces y vinos, e Inés es diabética. Laura le dice a
sus hijos que ya se pueden sentar en la mesa para cenar, cuando se da cuenta de
que no están. Martín le dice que han sido muy listos han dejado la tele puesta
para que se pensaran que estaban en el comedor y se han bajado a la calle. Con
este comentario Laura resuelve el caso.
Resolución
Trama personal
Laura tiene dos hijos pequeños, gemelos Carlos y Javier, estos son
muy traviesos y los han expulsado del colegio, ahora Laura tiene la tarea de
encontrar otro centro. Los gemelos tienen muy buena relación con Martín (mejor
que con su padre) lo consideran su tío. Laura está en trámites de divorcio con
su ex marido Jacobo, trabaja de Comisario Jefe en otra comisaria. No acepta lo
del divorcio e insiste en volver con ella. Laura ha encontrado un colegio para
los niños, pero antes de admitirlos quieren hacer una entrevista con los
padres. Jacobo no acude a la entrevista, mas tarde, se disculpa con Laura, le
dice que no pudo ir, porque tenía una reunión con el Gerente de seguridad.
Martin hace saber a Laura que Félix (el jefe de la comisaria) estuvo toda la
Mañana reunido con el Gerente y Jacobo no estaba allí.
Laura le pregunta abiertamente a Jacobo, si se está viendo con otra, a la vez que intenta volver con ella. Él le asegura que no. Laura le confiesa a su vecina y amiga Maite que se está planteando volver con Jacobo. Maite alarmada se lo cuenta a Martín. Él le dice que antes de volver con Jacobo hay otras opciones. Laura le responde que se pasa el día con ella y sabe perfectamente que no hay otras opciones. Por la noche Laura está mirando fotos de cuando era más joven, Javier se despierta y se pone a mirar fotos con ella. Llegan a una foto dónde está Laura con Martín y Jacobo, cuando estudiaban en la academia de policía. El niño le pregunta por qué se caso con su padre. Laura le responde que en aquella época eran novios y él se lo pidió. Siguen pasando fotos hasta que aparecen las fotos de la boda de Laura y Jacobo. Javier se da cuenta de que Martín no sale en ellas, y le pregunta a su madre sí, no fue a la boda. Laura un poco molesta, le explica que Martín se fue de fin de semana y no llego a tiempo.
Laura le pregunta abiertamente a Jacobo, si se está viendo con otra, a la vez que intenta volver con ella. Él le asegura que no. Laura le confiesa a su vecina y amiga Maite que se está planteando volver con Jacobo. Maite alarmada se lo cuenta a Martín. Él le dice que antes de volver con Jacobo hay otras opciones. Laura le responde que se pasa el día con ella y sabe perfectamente que no hay otras opciones. Por la noche Laura está mirando fotos de cuando era más joven, Javier se despierta y se pone a mirar fotos con ella. Llegan a una foto dónde está Laura con Martín y Jacobo, cuando estudiaban en la academia de policía. El niño le pregunta por qué se caso con su padre. Laura le responde que en aquella época eran novios y él se lo pidió. Siguen pasando fotos hasta que aparecen las fotos de la boda de Laura y Jacobo. Javier se da cuenta de que Martín no sale en ellas, y le pregunta a su madre sí, no fue a la boda. Laura un poco molesta, le explica que Martín se fue de fin de semana y no llego a tiempo.
Con la detención de Gerardo el puesto de Comisario Jefe queda
vacante y el nombre que suena con más fuerza para sustituirlo es Martín. Félix
lo hace ir a su despacho, el se piensa que es para ofrecerle el cargo. Pero se
queda de piedra cuando le dice que alguien lo ha denunciado por mantener
relaciones con una sospechosa durante la investigación. Los de Asuntos Internos
le van a investigar. Cuando Martín sale del despacho llega Jacobo, Laura se
sorprende de verlo. Él le dice que le tiene preparada una sorpresa. Es entonces
cuando Félix anuncia que Jacobo es el nuevo Comisario Jefe. Laura y Martín se
quedan alucinados. Jacobo se encuentra con Lidia, y le pregunta si va a poder
trabajar con su ex mujer y su amante a la vez. Es Lidia quien ha denunciado a
Martín, para que le dieran el puesto a Jacobo.
1x2 EL MISTERIO DEL
VECINDARIO PERFECTO
Caso
En una idílica urbanización que tiene por nombre los Prados
Soleados viven 6 vecinos que aparentemente se llevan muy bien. Uno de Ellos
Felipe Valbuena (militar en comunicaciones retirado) está a punto de irse de
viaje. Los vecinos van a buscarle para invitarle a una barbacoa que han hecho
en el jardín, en un principio no quiere ir, pero entre todos le convencen para
que se quede. Cuando el hombre vuelve a su casa se empieza a encontrar mal.
Valbuena coge el teléfono y llama a la policía, mientras habla con ellos se
mete en la bañera y da unos golpecitos en ella con el móvil.
Unas horas más tarde se presentan en la urbanización Martín y
Laura. Les hacen saber a los vecinos que Valbuena ha muerto y que los
resultados preliminares de la autopsia revelan que fue envenenado. Estos
consternados les explican que horas antes habían hecho una barbacoa, pero no
paso nada extraño, todo se desarrollo con absoluta normalidad. Laura les
pregunta que comieron y bebieron, los
vecinos le responde que no comieron nada, pero bebieron bastante sangría.
Martín les pregunta si Valbuena se llevaba mal con alguien, ellos les dice que
con su sobrina Begoña, se ve que la chica ha estado varias veces en la cárcel
por robar en grandes superficies, la última vez que la vieron fue el día
anterior a la muerte de su tío. Martín les comenta que tienen un paisaje muy
bonito. Unos de los vecinos le dice que a ellos les preocupa mucho el medio
ambiente. Le enseña un olivo y le dice que este olivo simboliza su preocupación
por el medio ambiente, al cual llaman “el general” Después de hablar con los
vecinos Laura y Martín visitan la casa de Valbuena. Laura ve que tiene una foto
de un perro y se lo comenta a Martin. Este le explica, que por los vecinos ha
sabido que el perro murió hace unos días. Antes de irse de la urbanización
Laura mira en el cubo de basura y le dice a Martin que se llevarán las bolsas
por si encuentran algo.
Laura está en la sala de reuniones con Martin analizando las bolsas de basura. Le comenta que le extraña que para una barbacoa comprasen tan poca comida y lo poco que compraron no se lo comieran. En ese momento llega Cuevas y les dice que la sobrina de Valbuena está desaparecida y no dan con ella. Martín y Laura empiezan a investigar a los vecinos, como Laura se hace un lio con los nombres les ponen motes:
Los Róper
(matrimonio con dos hijos, el es concejal)
Musculmen
(fabrica fungicidas)
La operada
(vive sola)
Barbie y Ken
(ella es enfermera y el arquitecto)
Al día
siguiente Martín y Laura vuelven a la urbanización. Laura le comenta a Martín que es una pena que
no hayan seguido construyendo aquí, ya que tienen mucho espacio. Él le dice que
en un principio iban a construir un centro comercial, pero las obras se
paralizaron cuando se supo que el constructor hizo un desfalco y huyo con el
dinero. En ese momento llega una chica joven, que les pregunta si son los
policías que están investigando la muerte de Valbuena, Laura le responde que sí.
La chica se presenta como la hermana de Mónica (la operada) les dice que vive
con ella. Cuando la chica se va Martín se da cuenta de que Mónica vive sola, y
que por lo tanto no es su hermana, tiene que ser la sobrina de
Valbuena. Martín y Laura van tras ella. Una vez en comisaría. Begoña les
reconoce que tenía mala relación con su tío, porque a este no le gustaba que
robara. Pero la última vez que salió de la cárcel pasó algo: se quedo
embarazada, y como el padre de la criatura no quería hacerse cargo, su tío
estaba dispuesto acogerla en su casa. La última vez que lo vio lo noto extraño,
le dijo que había descubierto algo, pero no quería decir nada hasta estar
seguro.
Laura vuelve a ir a casa de Valbuena esta vez con Cuevas y suben a la habitación. Le pide que mire en el armario. Cuevas le dice que solo hay una maleta y ropa mal planchada. Laura coge una camisa y le dice que esto no está mal planchado, esta arrugado de haber estado doblado en una maleta. Le pide que busque si hay otra maleta en otro lugar. Cuevas mira debajo de la cama, efectivamente hay otra maleta. Laura cree que Valbuena se iba a ir de viaje y alguien deshizo la maleta por él.
Laura hace venir a Mónica a comisaría y le pregunta si Felipe se llevaba mal con algún vecino. Ella le explica que son muy pocos y todos se llevan muy bien. Valbuena se pasaba el día haciendo escuchas por la radio, lo sabe porque lo veía desde su casa. Laura también le pregunta si Valbuena les comento si se iba a ir de viaje, la mujer le responde que no sabían nada. Cuando Mónica se va Laura coge los planos de casa de Valbuena y comprueba que la habitación donde tiene la radio militar, da a la habitación de matrimonio de Barbie y Ken. Laura está convencida que Mónica y Ken son amantes. Ella y Martín se presentan en el estudio de arquitectura de Ken y le pregunta si él y Mónica son amantes, este les dice que no, estas últimas semanas se ha quedado a dormir en el estudio, les aconseja que lo hablen con su mujer. Laura y Martín van a casa de Barbie, y les reconoce que ella y Mónica son amantes y que a Valbuena le gustaba echar un ojo, pero nada más.
Han descubierto que el concejal paralizo las obras del centro comercial, y Laura y Martín van hablar con él. Les asegura que no lo mato, poco después de paralizar las obras, se descubrió el desfalco y el constructor desapareció. Mientras Laura habla con el concejal, Martín saluda a los hijos de este. El niño le pregunta si van a detener a sus padres por haber atropellado al perro de Valbuena. La hermana le dice que se calle, que no pueden decir nada. Martin consigue ganarse la confianza de ambos y que les cuente lo que paso. Hace unos días, al salir del garaje atropellaron al perro, según ellos fue un accidente. Cuando el concejal y los niños se van, Martin pone al corriente a Laura de lo que ha descubierto. Van a la entrada del garaje para ver si encuentras restos de sangre, pero no ven nada. Laura va hacia la acera, y allí sí que hay restos de sangre. Lo cual les extraña a los dos, porque eso significa que para atropellar al perro subieron el coche encima de la acera.
Lidia ya tiene los resultados de la autopsia han identificado el tipo de veneno: fungicida. Laura y Martin saben que solo hay una persona que trabaje con este producto. Musculmen niega haber dado el veneno a Valbuena. Laura le dice que él es el único, que trabaja con fungicidas. El hombre le explica que hace unos meses Valbuena le pidió que contratara a su sobrina para que trabajara con él, hace un mes la despidió porque descubrió que le robaba. Los vecinos se presentan en comisaría y le dicen a Jacobo que están cansados de las acusaciones de Laura y quieren pasar la prueba del polígrafo, para que vean que no tienen nada que ocultar. Todos pasan por el polígrafo, y a la pregunta “mato a Valbuena” todos responden que no, y el polígrafo determina que dicen la verdad. Laura hace venir a la sobrina de Valbuena a comisaría y le pregunta si a Musculmen a parte de dinero le robaba algo más. La chica le dice que por algunos productos que tenía en el almacén, en el mercado negro pagan mucho dinero. Tanto Laura como Martin creen en su inocencia, pero como todas las pruebas apuntan a ella queda detenida.
Laura está en casa preparando la cena a la vez que escucha la grabación que Valbuena hizo a la policía. En Ella se escucha los golpes que dio en la bañera con el móvil, Laura repite los golpes en la olla y con esto resuelve el caso.
Resolución
Laura reúne a los vecinos en casa de Valbuena y Empieza su relato:
Hace unos meses iban a empezar las obras para construir un centro comercial. Todos los vecinos estaban en contra, primero porque estropearía el paisaje y segundo porque acabaría con la tranquilidad de la urbanización. El concejal consiguió paralizar las obras. Pero unos meses después el constructor comprando las manos adecuadas las volvió a reanudar. Fue entonces cuando el concejal lo mato. Aprovecho que había cometido un desfalco, para hacer creer que había desaparecido. El resto de vecinos se hacen los sorprendidos, pero Laura les pide que no disimulen, todos ellos le ayudaron a enterrar el cadáver. El único que quedo al margen de esto, fue el último en llegar: Valbuena. Su perro empezó a escarbar donde estaba enterrado el cadáver y viendo que podía salir a la luz, el concejal lo atropello. Valbuena no tardo en descubrirlo, y quiso huir de la urbanización, pero los vecinos ya tenían un plan. Organizar una barbacoa, como era de pega compraron poca comida, el veneno estaba en la sangría, el único que bebió fue Valbuena, el resto lo simularon. Como nadie quería ser el responsable de echar el veneno, sacaron 6 vasos con agua (uno de ellos aparte del agua tenía el veneno) cada uno cogió un vaso y lo echo en la sangría. Por eso cuando pasaron la prueba del polígrafo, la maquina lo dio por bueno, de hecho estaban diciendo la verdad, nadie pensaba que lo había matado.
El concejal le dice que toda esta historia está muy bien, pero no tiene pruebas que la demuestren. Laura le dice que si las tiene, pone la grabación que Valbuena hizo a la Policía. Les pide que presten atención a los golpes que el hombre da con el móvil. En un principio Laura se pensó que eran espasmos, hasta que en la autopsia vio que los productos de Musculmen no producen ese efecto. Eran movimientos voluntarios. Concretamente lenguaje morse. Lo que Valbuena dejo grabado fue: “cadáver bajo el general” el olivo que tanto admiran los vecinos. Jacobo les dice que si colaboran hablara con el juez para que les reduzca la condena. A partir de ahí se empiezan acusar los unos a los otros.
Trama personal
Maite se queda al cargo de los gemelos. En un descuido de la chica que está mirando al vecino cachitas de enfrente, los gemelos se escapan con globos de agua y los tiran en el ascensor. El ascensor se estropea, estos se asustan y se meten corriendo en casa. Victoria vecina de Laura y propietaria del bar de abajo, los ha visto y quiere que Laura pague la reparación. Laura le dice a Victoria que no tiene tanto dinero. Maite sale en su defensa y le dice a Victoria que aquella hora estaba fregando la escalera, mientras miraba al vecino de enfrente y seguramente se le cayó el cubo y por eso se estropeo el ascensor. Victoria reconoce que podría ser. Al final llegan al acuerdo de que lo pagaran entre todos los vecinos.
Jacobo hace saber a Martín que la vista sobre su caso se celebrara esta tarde. Martín le pregunta si no ha podido hacer nada por evitarlo, este no sabe que decirle. Martín se da cuenta de que no va hacer nada por ayudarle, porque en el fondo se lo quiere quitar de encima. Le pide a Cuevas que borre de su historial los nombres de unas sospechosas con las que mantuvo relaciones extraoficiales. Cuevas le pregunta que le da a cambio, y él le dice que le dejara ir a investigar con Laura. Cuando Cuevas está a punto de borrar los nombres ve un apunte donde dice que lo querían ascender y Martín aconsejo que no lo hicieran. Cuevas, cabreado imprime el informe y se lo da a Lidia. Al día siguiente Cuevas le pregunta a Martín porque le denegó el ascenso, este le dice que lo querían a ascender a jefe de informática, y les aconsejo que no lo hicieran, para que pudiera seguir investigando con ellos. Cuevas se da cuenta de su error y le cuenta lo que ha hecho con el informe. Martín consigue llevarse el informe de la mesa de Lidia, sin que esta se dé cuenta.
Laura está escribiendo en la sala de reuniones. Cuando entra Martín lo tapa con las manos para que él no lo vea. A pesar de ello, Martín ve escrito su nombre, y le pregunta si está escribiendo sobre él. Laura le dice que está se esta preparando unas palabras para su vista, por si acaso no sabe que decir. Martín le pide que se lo deje leer, pero ella no quiere. Él le intenta coger la hoja pero ella no se deja. Cuando la tiene acorralada, le pide que se lo deje leer, para saber lo que piensa y poder defenderse. Laura le responde que sabe perfectamente lo que piensa de él, que es un cabezota insoportable. Martín le pregunta que si es así, porque no ha solicitado un cambio de compañero en todos estos años. Laura le dice que no lo puede dejar solo, tiene que cuidar de él, porque no sabe lo que quiere. Martín le responde que puede que siempre lo haya sabido, pero nunca le han hecho caso. Se quedan mirando muy cerca el uno del otro. Laura se está empezando a poner nerviosa con la situación, y le pregunta si es así como lo hace con sus ligues, si la está intentando engatusar para que declare a su favor. Martín se enfada con este comentario y le dice que si piensa así, es que no lo conoce en absoluto.
Lidia le da a Jacobo una bolsa con las cosas que se dejo en su casa. Más tarde Laura entra en el despacho y ve la bolsa, dentro hay una camisa. En ese momento llega Jacobo y Laura le tira la camisa a la cara. Le dice que ha estado con otra, a la vez que intentaba volver con ella. Jacobo le pregunta de donde se saca estas cosas. Laura le responde que la camisa tiene una mancha de carmín en el cuello. Jacobo quiere aprovechar que tiene el polígrafo, para que Laura le pregunte por sus sentimientos y vea que no miente. Laura le pregunta si estuvo con alguien mientras estuvieron casados, Jacobo responde que no. En la pantalla Laura ve que dice la verdad. Entonces Laura le pregunta si estuvo con alguien después de separarse, Jacobo vuelve a responder que no. Pero esta vez el polígrafo determina que miente, y Laura se lo echa en cara. Jacobo le pide que le pregunte si la quiere. Laura le pregunta si ha organizado la vista de Martín por celos, y si es por eso que se niega a firmar los papeles del divorcio.
Llega el día de la vista de Martín. Laura se ha dejado el escrito y no sabe bien que decir. Ella cree que se lo ha dejado en casa, pero en realidad está en el despacho de Jacobo. Él lo encuentra y lo lee. Después de saber lo importante que es Martín para Laura, habla con los de asuntos internos, y consigue que se quede y cierren el caso.
Los gemelos llegan solos a casa con un sobre. Laura les pregunta donde esta Jacobo. Los niños le dicen que los ha dejado en el portal y les ha dado este sobre para ella. Laura lo abre, son los papeles del divorcio firmados. Ahora que Laura tiene lo que quiere, no parece estar muy contenta.
1x3 EL MISTERIO DE LA CUARTADA PERFECTA
Caso
Una mujer queda para verse con su amante en un chalet de lujo. Cuando llega le pregunta si ya tiene preparada la comida, él le dice que no, porque no la esperaba tan pronto. (En la mesita de centro, hay unos frutos secos esparcidos) la mujer le dice que se va a poner cómoda, y ahora baja. Antes de irse, el hombre le pide que le deje una libreta. Cuando la mujer vuelve, el hombre sigue sentado en la silla, ella va por detrás y lo rodea con los brazos, nota algo raro. Se mira las manos y las tiene cubiertas de sangre, está muerto. La mujer se asusta y se marcha. Sin darse cuenta que el asesino la está observando. Cuando la mujer llega a su casa se desviste y tira la ropa a la basura, luego se da una ducha para quitarse los restos de sangre. En estas llega el marido: es el asesino. Unos días después la criada del chalet encuentra el cadáver y llama a la Policía.
Cuando Laura y Martín llegan a la casa, Jacobo y Lidia ya están allí. Jacobo les explica que la casa se utiliza para alquilar a parejas y por lo tanto no saben quién es la víctima. Lidia le dice a Laura que el hombre lleva un par de días muerto, y es difícil establecer la hora del crimen. Pero cree que murió sobre las doce del mediodía. Laura da una ojeada a la casa y le llama la atención la mesa con los frutos secos. Debajo encuentra la libreta, Laura le comenta a Martín que han arrancado una hoja. Al salir de la casa Martín pisa un charco, se moja los pantalones y se los tiene que arremangar.
Pasados unos días Jacobo hace saber a Laura que han encontrado a la última persona que estuvo con la víctima, y ya saben quién es: se trata de Julián Montoro un conocido jugador de ajedrez. Laura y Martín van a casa de Marta, la amante. Martín le pregunta por qué huyo cuando vio el cadáver en lugar de llamar a la policía, esta le dice que se asusto y tenía miedo de que el asesino aún estuviese en la casa. Laura le pregunta si su marido sabia que tenía un amante, la mujer le responde que cree que no, pero no está segura. Están hablando en la cocina, y Laura ve un plato con unas perdices. Marta le explica que esta noche su marido tiene una cena con el alcalde, y puesto que no está la criada tendrá que cocinar ella. Laura le pregunta si ya sabe como las va a cocinar, al decirle que no, se ofrece a enseñarle. Le pide a Martín que le pase un cuchillo y empieza a cortar. A la mujer le da mucho asco, casi vomita. Martín se da cuenta que en el juego de cuchillos falta uno, que casualmente se corresponde al que encontraron en la escena del crimen. Ante esta evidencia, la mujer queda detenida.
Laura hace venir a comisaría a Sebastián Soto, el marido. También es jugador de ajedrez, de hecho Montoro era su rival en el campeonato. Laura le hace saber que su mujer está detenida por el asesinato de Montoro, a este parece no preocuparle demasiado. Martín le pregunta donde estaba el día del crimen. El les dice que estaba jugando una partida de ajedrez con la rival Noelia Quintana delante de 300 personas. Es más tiene la partida grabada, y les da el vídeo. Cuando Soto se dispone a marchar se cruza con Jacobo, se conocen, coincidieron en la universidad, pero no se llevan nada bien.
Laura y Martín ven el vídeo de la partida, ella se da cuenta que Soto tiene los bajos de los pantalones doblados, igual que cuando Martín piso el charco. Para Laura es una prueba de que estuvo en la casa, ahora solo tiene que demostrar como lo hizo. Laura y Martín van al teatro donde se disputa el torneo de ajedrez hablar con Quintana, que en este momento se está discutiendo a voz en grito con el organizador del torneo. Cuando la cosa se calma Laura le pregunta si durante la partida hubo algún descanso y si noto a Soto nervioso, ella le dice que no a las dos cosas. Al marcharse se encuentran con el organizador del torneo, y Laura le pregunta de que discutía con Quintana. Este le explica que Quintana juega siempre con las mismas piezas, el día que murió Montoro, las piezas desaparecieron y retrasaron la partida media hora para buscarlas. Al no encontrarlas tuvo que jugar con otras piezas y perdió. Ahora pide que se dé por nula la partida y se vuelva a jugar. Al saber que la partida se retraso media hora, Laura cree que Soto tuvo tiempo suficiente de salir del torneo, ir a la casa, matar a Montoro y volver. Para comprobarlo Laura y Martín deciden hacer el trayecto del torneo a la casa, y se tarda media hora justa.
Sus ilusiones se desvanecen cuando llegan a comisaría y Jacobo les dice que aquel día en esa carretera hubo un accidente. Un camión volcó y cortaron la carretera durante más de dos horas. Martín sugiere que quizá cogió otra ruta, pero Jacobo le dice que solo esa carretera lleva del torneo a la casa. Laura vuelve a interrogar a la mujer, le pregunta si al volver de la casa, vio el accidente. Ella le dice que no recuerda nada de eso, y a Laura le extraña.
Soto está en su despacho, mirando la hoja que arranco de la libreta de Montoro el día que lo mato. Es una jugada de ajedrez con la que puede ganar el campeonato. Cuando se presenta Quintana con su chiguagua y le insiste en que le conceda la revancha. Él se niega. El perro se mea en la alfombra. Soto sale del despacho en busca de la criada para que lo limpie. Al abrir la puerta se vuelan unos papeles, entre ellos, Quintana ve la jugada de Montoro y se lo queda. Más tarde, Quintana está en la habitación del hotel, viendo por el ordenador la partida del día en que murió Montoro, con el papel de la jugada en la mano. En estas llega el mayordomo que acaba de pasear al perro. En ese momento Quintana ve algo en el video que le llama la atención, echa al mayordomo de malas maneras y llama a Soto. Le dice que sabe como lo hizo y tienen que hablar. Quedan en la sala donde se disputa el torneo. Quintana le dice que si no quiere que le cuente a la policía como mato a Montoro tiene que concederle la revancha. Este sin mediar palabra le mete una nota en el bolsillo. Quintana, le pregunta que es, y Soto le dice que su nota de suicidio, dicho esto la estrangula. El perro asustado se esconde entre las butacas. Soto antes de irse le coge el papel de la jugada.
Al día siguiente cuando el organizador del torneo llega se la encuentra colgada, y llama a la Policía. El perro aprovecha que esta la puerta abierta para escaparse, e ir a la habitación de hotel de su dueña, donde ya están Laura y Martín. Laura al ver perro, lo coge y ve que tiene manchas de sangre, ella está convencida que el perro vio el asesinato y decide quedárselo, a pesar de que no para de estornudar porque tiene alergia a los perros. El mayordomo les explica que la última vez que vio a Quintana estaba mirando el portátil con un papel en la mano. (Laura está convencida que es el papel que arrancaron de la libreta de Montoro) de repente vio algo en el ordenador que la altero muchísimo y lo hecho de la habitación. Martín echa un vistazo al ordenador, y descubre que lo último que vio Quintana antes de morir fue el video de la partida, y antes de eso se gasto un dineral comprando ropa por internet, por eso Laura no cree que se suicidara. Laura va a casa de Soto, le informa de que Quintana ha muerto, y le pregunta donde estuvo ayer por la noche, este le dice que en casa, jugando una partida de ajedrez en el ordenador. Como prueba le enseña el ordenador donde aparece registradas las horas que estuvo jugando. Al cabo de unos minutos Laura vuelve a ir a casa de Soto y le dice que ha estado hablando con la criada, y le ha contado que anoche no ceno en casa, ya que no había platos sucios. El hombre le responde que luego los fregó. A esto Laura le dice que la criada le ha contado que normalmente no suele fregar los platos. Laura vuelve una tercera vez, para preguntarle si la agenda electrónica que tiene en su despacho se puede conectar al ordenador, porque eso demostraría que para jugar la partida, no necesariamente tenía que estar en casa. Soto que ha perdido los nervios por completo, le responde que no lo sabe, y la echa de malos modos de su casa. Laura le advierte que la próxima vez que se vean será con una orden de detención.
Laura está en casa haciendo un bizcocho, lo mete en el horno y pone el despertador para que le avise cuando haya que sacarlo. El reloj suena, Laura lo saca y ve que el bizcocho se le ha quemado. Con esto resuelve el caso.
Resolución
Llega el día de la final. Soto aparentemente está tranquilo, hasta que entre el público ve a su mujer, a Laura, Jacobo y Martín. Empieza la partida. Al rato en la pantalla gigante sale una jugada que a Laura le llama la atención y con la que Soto se proclama campeón. En ese momento Laura baja las escaleras corriendo con las esposas y lo detiene.
Al llegar a comisaria Laura le explica a Soto. Que siempre habían pensado que era un problema de espacio, cuando realidad era un problema de tiempo. El asesinato se cometió una hora antes, es decir a las once. Para que la mujer no se diera cuenta atraso todos los relojes de la casa, incluidos el de su mujer y el suyo. Pero luego no se acordó de ponerlo a la hora actual. Eso es lo que vio Quintana en el video, el reloj de Soto con la hora cambiada. Por eso cuando la mujer llego a la casa Montoro no había preparado la comida, por eso Soto pudo ir por la carretera sin problemas, y por eso la mujer no recordaba el accidente de camión, porque todavía no se había producido.
Soto le dice que eso no prueba nada. Laura le responde que quizá no. Pero el papelito de la jugada que ideo Montoro y que él se llevo de la escena del crimen sí. Laura le insiste en que esa jugada es con la que ha ganado el campeonato. Soto le dice que es lógico, porque esa jugada es idea suya. Martín le explica que en la casa, había una mesa de centro con frutos esparcidos, y la disposición de los frutos es idéntica a la de la jugada. Es muy poco probable que dos jugadores ideen la misma jugada.
Laura vuelve a ir a casa de Valbuena esta vez con Cuevas y suben a la habitación. Le pide que mire en el armario. Cuevas le dice que solo hay una maleta y ropa mal planchada. Laura coge una camisa y le dice que esto no está mal planchado, esta arrugado de haber estado doblado en una maleta. Le pide que busque si hay otra maleta en otro lugar. Cuevas mira debajo de la cama, efectivamente hay otra maleta. Laura cree que Valbuena se iba a ir de viaje y alguien deshizo la maleta por él.
Laura hace venir a Mónica a comisaría y le pregunta si Felipe se llevaba mal con algún vecino. Ella le explica que son muy pocos y todos se llevan muy bien. Valbuena se pasaba el día haciendo escuchas por la radio, lo sabe porque lo veía desde su casa. Laura también le pregunta si Valbuena les comento si se iba a ir de viaje, la mujer le responde que no sabían nada. Cuando Mónica se va Laura coge los planos de casa de Valbuena y comprueba que la habitación donde tiene la radio militar, da a la habitación de matrimonio de Barbie y Ken. Laura está convencida que Mónica y Ken son amantes. Ella y Martín se presentan en el estudio de arquitectura de Ken y le pregunta si él y Mónica son amantes, este les dice que no, estas últimas semanas se ha quedado a dormir en el estudio, les aconseja que lo hablen con su mujer. Laura y Martín van a casa de Barbie, y les reconoce que ella y Mónica son amantes y que a Valbuena le gustaba echar un ojo, pero nada más.
Han descubierto que el concejal paralizo las obras del centro comercial, y Laura y Martín van hablar con él. Les asegura que no lo mato, poco después de paralizar las obras, se descubrió el desfalco y el constructor desapareció. Mientras Laura habla con el concejal, Martín saluda a los hijos de este. El niño le pregunta si van a detener a sus padres por haber atropellado al perro de Valbuena. La hermana le dice que se calle, que no pueden decir nada. Martin consigue ganarse la confianza de ambos y que les cuente lo que paso. Hace unos días, al salir del garaje atropellaron al perro, según ellos fue un accidente. Cuando el concejal y los niños se van, Martin pone al corriente a Laura de lo que ha descubierto. Van a la entrada del garaje para ver si encuentras restos de sangre, pero no ven nada. Laura va hacia la acera, y allí sí que hay restos de sangre. Lo cual les extraña a los dos, porque eso significa que para atropellar al perro subieron el coche encima de la acera.
Lidia ya tiene los resultados de la autopsia han identificado el tipo de veneno: fungicida. Laura y Martin saben que solo hay una persona que trabaje con este producto. Musculmen niega haber dado el veneno a Valbuena. Laura le dice que él es el único, que trabaja con fungicidas. El hombre le explica que hace unos meses Valbuena le pidió que contratara a su sobrina para que trabajara con él, hace un mes la despidió porque descubrió que le robaba. Los vecinos se presentan en comisaría y le dicen a Jacobo que están cansados de las acusaciones de Laura y quieren pasar la prueba del polígrafo, para que vean que no tienen nada que ocultar. Todos pasan por el polígrafo, y a la pregunta “mato a Valbuena” todos responden que no, y el polígrafo determina que dicen la verdad. Laura hace venir a la sobrina de Valbuena a comisaría y le pregunta si a Musculmen a parte de dinero le robaba algo más. La chica le dice que por algunos productos que tenía en el almacén, en el mercado negro pagan mucho dinero. Tanto Laura como Martin creen en su inocencia, pero como todas las pruebas apuntan a ella queda detenida.
Laura está en casa preparando la cena a la vez que escucha la grabación que Valbuena hizo a la policía. En Ella se escucha los golpes que dio en la bañera con el móvil, Laura repite los golpes en la olla y con esto resuelve el caso.
Resolución
Laura reúne a los vecinos en casa de Valbuena y Empieza su relato:
Hace unos meses iban a empezar las obras para construir un centro comercial. Todos los vecinos estaban en contra, primero porque estropearía el paisaje y segundo porque acabaría con la tranquilidad de la urbanización. El concejal consiguió paralizar las obras. Pero unos meses después el constructor comprando las manos adecuadas las volvió a reanudar. Fue entonces cuando el concejal lo mato. Aprovecho que había cometido un desfalco, para hacer creer que había desaparecido. El resto de vecinos se hacen los sorprendidos, pero Laura les pide que no disimulen, todos ellos le ayudaron a enterrar el cadáver. El único que quedo al margen de esto, fue el último en llegar: Valbuena. Su perro empezó a escarbar donde estaba enterrado el cadáver y viendo que podía salir a la luz, el concejal lo atropello. Valbuena no tardo en descubrirlo, y quiso huir de la urbanización, pero los vecinos ya tenían un plan. Organizar una barbacoa, como era de pega compraron poca comida, el veneno estaba en la sangría, el único que bebió fue Valbuena, el resto lo simularon. Como nadie quería ser el responsable de echar el veneno, sacaron 6 vasos con agua (uno de ellos aparte del agua tenía el veneno) cada uno cogió un vaso y lo echo en la sangría. Por eso cuando pasaron la prueba del polígrafo, la maquina lo dio por bueno, de hecho estaban diciendo la verdad, nadie pensaba que lo había matado.
El concejal le dice que toda esta historia está muy bien, pero no tiene pruebas que la demuestren. Laura le dice que si las tiene, pone la grabación que Valbuena hizo a la Policía. Les pide que presten atención a los golpes que el hombre da con el móvil. En un principio Laura se pensó que eran espasmos, hasta que en la autopsia vio que los productos de Musculmen no producen ese efecto. Eran movimientos voluntarios. Concretamente lenguaje morse. Lo que Valbuena dejo grabado fue: “cadáver bajo el general” el olivo que tanto admiran los vecinos. Jacobo les dice que si colaboran hablara con el juez para que les reduzca la condena. A partir de ahí se empiezan acusar los unos a los otros.
Trama personal
Maite se queda al cargo de los gemelos. En un descuido de la chica que está mirando al vecino cachitas de enfrente, los gemelos se escapan con globos de agua y los tiran en el ascensor. El ascensor se estropea, estos se asustan y se meten corriendo en casa. Victoria vecina de Laura y propietaria del bar de abajo, los ha visto y quiere que Laura pague la reparación. Laura le dice a Victoria que no tiene tanto dinero. Maite sale en su defensa y le dice a Victoria que aquella hora estaba fregando la escalera, mientras miraba al vecino de enfrente y seguramente se le cayó el cubo y por eso se estropeo el ascensor. Victoria reconoce que podría ser. Al final llegan al acuerdo de que lo pagaran entre todos los vecinos.
Jacobo hace saber a Martín que la vista sobre su caso se celebrara esta tarde. Martín le pregunta si no ha podido hacer nada por evitarlo, este no sabe que decirle. Martín se da cuenta de que no va hacer nada por ayudarle, porque en el fondo se lo quiere quitar de encima. Le pide a Cuevas que borre de su historial los nombres de unas sospechosas con las que mantuvo relaciones extraoficiales. Cuevas le pregunta que le da a cambio, y él le dice que le dejara ir a investigar con Laura. Cuando Cuevas está a punto de borrar los nombres ve un apunte donde dice que lo querían ascender y Martín aconsejo que no lo hicieran. Cuevas, cabreado imprime el informe y se lo da a Lidia. Al día siguiente Cuevas le pregunta a Martín porque le denegó el ascenso, este le dice que lo querían a ascender a jefe de informática, y les aconsejo que no lo hicieran, para que pudiera seguir investigando con ellos. Cuevas se da cuenta de su error y le cuenta lo que ha hecho con el informe. Martín consigue llevarse el informe de la mesa de Lidia, sin que esta se dé cuenta.
Laura está escribiendo en la sala de reuniones. Cuando entra Martín lo tapa con las manos para que él no lo vea. A pesar de ello, Martín ve escrito su nombre, y le pregunta si está escribiendo sobre él. Laura le dice que está se esta preparando unas palabras para su vista, por si acaso no sabe que decir. Martín le pide que se lo deje leer, pero ella no quiere. Él le intenta coger la hoja pero ella no se deja. Cuando la tiene acorralada, le pide que se lo deje leer, para saber lo que piensa y poder defenderse. Laura le responde que sabe perfectamente lo que piensa de él, que es un cabezota insoportable. Martín le pregunta que si es así, porque no ha solicitado un cambio de compañero en todos estos años. Laura le dice que no lo puede dejar solo, tiene que cuidar de él, porque no sabe lo que quiere. Martín le responde que puede que siempre lo haya sabido, pero nunca le han hecho caso. Se quedan mirando muy cerca el uno del otro. Laura se está empezando a poner nerviosa con la situación, y le pregunta si es así como lo hace con sus ligues, si la está intentando engatusar para que declare a su favor. Martín se enfada con este comentario y le dice que si piensa así, es que no lo conoce en absoluto.
Lidia le da a Jacobo una bolsa con las cosas que se dejo en su casa. Más tarde Laura entra en el despacho y ve la bolsa, dentro hay una camisa. En ese momento llega Jacobo y Laura le tira la camisa a la cara. Le dice que ha estado con otra, a la vez que intentaba volver con ella. Jacobo le pregunta de donde se saca estas cosas. Laura le responde que la camisa tiene una mancha de carmín en el cuello. Jacobo quiere aprovechar que tiene el polígrafo, para que Laura le pregunte por sus sentimientos y vea que no miente. Laura le pregunta si estuvo con alguien mientras estuvieron casados, Jacobo responde que no. En la pantalla Laura ve que dice la verdad. Entonces Laura le pregunta si estuvo con alguien después de separarse, Jacobo vuelve a responder que no. Pero esta vez el polígrafo determina que miente, y Laura se lo echa en cara. Jacobo le pide que le pregunte si la quiere. Laura le pregunta si ha organizado la vista de Martín por celos, y si es por eso que se niega a firmar los papeles del divorcio.
Llega el día de la vista de Martín. Laura se ha dejado el escrito y no sabe bien que decir. Ella cree que se lo ha dejado en casa, pero en realidad está en el despacho de Jacobo. Él lo encuentra y lo lee. Después de saber lo importante que es Martín para Laura, habla con los de asuntos internos, y consigue que se quede y cierren el caso.
Los gemelos llegan solos a casa con un sobre. Laura les pregunta donde esta Jacobo. Los niños le dicen que los ha dejado en el portal y les ha dado este sobre para ella. Laura lo abre, son los papeles del divorcio firmados. Ahora que Laura tiene lo que quiere, no parece estar muy contenta.
1x3 EL MISTERIO DE LA CUARTADA PERFECTA
Caso
Una mujer queda para verse con su amante en un chalet de lujo. Cuando llega le pregunta si ya tiene preparada la comida, él le dice que no, porque no la esperaba tan pronto. (En la mesita de centro, hay unos frutos secos esparcidos) la mujer le dice que se va a poner cómoda, y ahora baja. Antes de irse, el hombre le pide que le deje una libreta. Cuando la mujer vuelve, el hombre sigue sentado en la silla, ella va por detrás y lo rodea con los brazos, nota algo raro. Se mira las manos y las tiene cubiertas de sangre, está muerto. La mujer se asusta y se marcha. Sin darse cuenta que el asesino la está observando. Cuando la mujer llega a su casa se desviste y tira la ropa a la basura, luego se da una ducha para quitarse los restos de sangre. En estas llega el marido: es el asesino. Unos días después la criada del chalet encuentra el cadáver y llama a la Policía.
Cuando Laura y Martín llegan a la casa, Jacobo y Lidia ya están allí. Jacobo les explica que la casa se utiliza para alquilar a parejas y por lo tanto no saben quién es la víctima. Lidia le dice a Laura que el hombre lleva un par de días muerto, y es difícil establecer la hora del crimen. Pero cree que murió sobre las doce del mediodía. Laura da una ojeada a la casa y le llama la atención la mesa con los frutos secos. Debajo encuentra la libreta, Laura le comenta a Martín que han arrancado una hoja. Al salir de la casa Martín pisa un charco, se moja los pantalones y se los tiene que arremangar.
Pasados unos días Jacobo hace saber a Laura que han encontrado a la última persona que estuvo con la víctima, y ya saben quién es: se trata de Julián Montoro un conocido jugador de ajedrez. Laura y Martín van a casa de Marta, la amante. Martín le pregunta por qué huyo cuando vio el cadáver en lugar de llamar a la policía, esta le dice que se asusto y tenía miedo de que el asesino aún estuviese en la casa. Laura le pregunta si su marido sabia que tenía un amante, la mujer le responde que cree que no, pero no está segura. Están hablando en la cocina, y Laura ve un plato con unas perdices. Marta le explica que esta noche su marido tiene una cena con el alcalde, y puesto que no está la criada tendrá que cocinar ella. Laura le pregunta si ya sabe como las va a cocinar, al decirle que no, se ofrece a enseñarle. Le pide a Martín que le pase un cuchillo y empieza a cortar. A la mujer le da mucho asco, casi vomita. Martín se da cuenta que en el juego de cuchillos falta uno, que casualmente se corresponde al que encontraron en la escena del crimen. Ante esta evidencia, la mujer queda detenida.
Laura hace venir a comisaría a Sebastián Soto, el marido. También es jugador de ajedrez, de hecho Montoro era su rival en el campeonato. Laura le hace saber que su mujer está detenida por el asesinato de Montoro, a este parece no preocuparle demasiado. Martín le pregunta donde estaba el día del crimen. El les dice que estaba jugando una partida de ajedrez con la rival Noelia Quintana delante de 300 personas. Es más tiene la partida grabada, y les da el vídeo. Cuando Soto se dispone a marchar se cruza con Jacobo, se conocen, coincidieron en la universidad, pero no se llevan nada bien.
Laura y Martín ven el vídeo de la partida, ella se da cuenta que Soto tiene los bajos de los pantalones doblados, igual que cuando Martín piso el charco. Para Laura es una prueba de que estuvo en la casa, ahora solo tiene que demostrar como lo hizo. Laura y Martín van al teatro donde se disputa el torneo de ajedrez hablar con Quintana, que en este momento se está discutiendo a voz en grito con el organizador del torneo. Cuando la cosa se calma Laura le pregunta si durante la partida hubo algún descanso y si noto a Soto nervioso, ella le dice que no a las dos cosas. Al marcharse se encuentran con el organizador del torneo, y Laura le pregunta de que discutía con Quintana. Este le explica que Quintana juega siempre con las mismas piezas, el día que murió Montoro, las piezas desaparecieron y retrasaron la partida media hora para buscarlas. Al no encontrarlas tuvo que jugar con otras piezas y perdió. Ahora pide que se dé por nula la partida y se vuelva a jugar. Al saber que la partida se retraso media hora, Laura cree que Soto tuvo tiempo suficiente de salir del torneo, ir a la casa, matar a Montoro y volver. Para comprobarlo Laura y Martín deciden hacer el trayecto del torneo a la casa, y se tarda media hora justa.
Sus ilusiones se desvanecen cuando llegan a comisaría y Jacobo les dice que aquel día en esa carretera hubo un accidente. Un camión volcó y cortaron la carretera durante más de dos horas. Martín sugiere que quizá cogió otra ruta, pero Jacobo le dice que solo esa carretera lleva del torneo a la casa. Laura vuelve a interrogar a la mujer, le pregunta si al volver de la casa, vio el accidente. Ella le dice que no recuerda nada de eso, y a Laura le extraña.
Soto está en su despacho, mirando la hoja que arranco de la libreta de Montoro el día que lo mato. Es una jugada de ajedrez con la que puede ganar el campeonato. Cuando se presenta Quintana con su chiguagua y le insiste en que le conceda la revancha. Él se niega. El perro se mea en la alfombra. Soto sale del despacho en busca de la criada para que lo limpie. Al abrir la puerta se vuelan unos papeles, entre ellos, Quintana ve la jugada de Montoro y se lo queda. Más tarde, Quintana está en la habitación del hotel, viendo por el ordenador la partida del día en que murió Montoro, con el papel de la jugada en la mano. En estas llega el mayordomo que acaba de pasear al perro. En ese momento Quintana ve algo en el video que le llama la atención, echa al mayordomo de malas maneras y llama a Soto. Le dice que sabe como lo hizo y tienen que hablar. Quedan en la sala donde se disputa el torneo. Quintana le dice que si no quiere que le cuente a la policía como mato a Montoro tiene que concederle la revancha. Este sin mediar palabra le mete una nota en el bolsillo. Quintana, le pregunta que es, y Soto le dice que su nota de suicidio, dicho esto la estrangula. El perro asustado se esconde entre las butacas. Soto antes de irse le coge el papel de la jugada.
Al día siguiente cuando el organizador del torneo llega se la encuentra colgada, y llama a la Policía. El perro aprovecha que esta la puerta abierta para escaparse, e ir a la habitación de hotel de su dueña, donde ya están Laura y Martín. Laura al ver perro, lo coge y ve que tiene manchas de sangre, ella está convencida que el perro vio el asesinato y decide quedárselo, a pesar de que no para de estornudar porque tiene alergia a los perros. El mayordomo les explica que la última vez que vio a Quintana estaba mirando el portátil con un papel en la mano. (Laura está convencida que es el papel que arrancaron de la libreta de Montoro) de repente vio algo en el ordenador que la altero muchísimo y lo hecho de la habitación. Martín echa un vistazo al ordenador, y descubre que lo último que vio Quintana antes de morir fue el video de la partida, y antes de eso se gasto un dineral comprando ropa por internet, por eso Laura no cree que se suicidara. Laura va a casa de Soto, le informa de que Quintana ha muerto, y le pregunta donde estuvo ayer por la noche, este le dice que en casa, jugando una partida de ajedrez en el ordenador. Como prueba le enseña el ordenador donde aparece registradas las horas que estuvo jugando. Al cabo de unos minutos Laura vuelve a ir a casa de Soto y le dice que ha estado hablando con la criada, y le ha contado que anoche no ceno en casa, ya que no había platos sucios. El hombre le responde que luego los fregó. A esto Laura le dice que la criada le ha contado que normalmente no suele fregar los platos. Laura vuelve una tercera vez, para preguntarle si la agenda electrónica que tiene en su despacho se puede conectar al ordenador, porque eso demostraría que para jugar la partida, no necesariamente tenía que estar en casa. Soto que ha perdido los nervios por completo, le responde que no lo sabe, y la echa de malos modos de su casa. Laura le advierte que la próxima vez que se vean será con una orden de detención.
Laura está en casa haciendo un bizcocho, lo mete en el horno y pone el despertador para que le avise cuando haya que sacarlo. El reloj suena, Laura lo saca y ve que el bizcocho se le ha quemado. Con esto resuelve el caso.
Resolución
Llega el día de la final. Soto aparentemente está tranquilo, hasta que entre el público ve a su mujer, a Laura, Jacobo y Martín. Empieza la partida. Al rato en la pantalla gigante sale una jugada que a Laura le llama la atención y con la que Soto se proclama campeón. En ese momento Laura baja las escaleras corriendo con las esposas y lo detiene.
Al llegar a comisaria Laura le explica a Soto. Que siempre habían pensado que era un problema de espacio, cuando realidad era un problema de tiempo. El asesinato se cometió una hora antes, es decir a las once. Para que la mujer no se diera cuenta atraso todos los relojes de la casa, incluidos el de su mujer y el suyo. Pero luego no se acordó de ponerlo a la hora actual. Eso es lo que vio Quintana en el video, el reloj de Soto con la hora cambiada. Por eso cuando la mujer llego a la casa Montoro no había preparado la comida, por eso Soto pudo ir por la carretera sin problemas, y por eso la mujer no recordaba el accidente de camión, porque todavía no se había producido.
Soto le dice que eso no prueba nada. Laura le responde que quizá no. Pero el papelito de la jugada que ideo Montoro y que él se llevo de la escena del crimen sí. Laura le insiste en que esa jugada es con la que ha ganado el campeonato. Soto le dice que es lógico, porque esa jugada es idea suya. Martín le explica que en la casa, había una mesa de centro con frutos esparcidos, y la disposición de los frutos es idéntica a la de la jugada. Es muy poco probable que dos jugadores ideen la misma jugada.
Trama
personal
Victoria se entera de que Laura tiene problemas
económicos, y le ofrece comprarle el piso para luego alquilárselo, de momento
Laura se niega. Los gemelos están obsesionados con romperse los dientes para
que venga el ratoncito Pérez. Laura está cocinando mientras los niños se pegan
con la intención de romperse los dientes. Laura harta coge una caja de zapatos
y les dice que el ratón está adentro, y se lo dará a Victoria para que lo
cuide. Al volver a la cocina ve que se ha prendido fuego. Lo apaga pero la
cocina ha quedado estropeada. Laura le dice a Jacobo que ha decidido vender el
piso a Victoria. Al día siguiente Maite va al bar de Victoria con los gemelos.
Los niños se meten debajo de la barra y ven la caja donde supuestamente esta el
ratoncito, la abren y empiezan a sacar papeles, Maite los ve y los coge para
volverlos a meter en la caja. Entre los papeles encuentra los planos de un piso.
Le pregunta a la camarera por los planos y ella le dice que Victoria va hacer
reformas en el nuevo piso que se va a comprar. Maite llama a Laura y le dice
que no venda el piso a Victoria, porque no tiene ninguna intención de
alquilárselo. Laura llega a tiempo para evitar la venta. Laura ve actitudes
cariñosas entre Jacobo y Lidia y empieza
a sospechar que están liados.
En la
comisaria se presenta una vidente para denunciar el robo de su bolso. Cuevas no
sabe rellenar el impreso de denuncia y Laura le enseña. La vidente lo aprovecha
para cogerle la mano y leérsela. Le dice que ve un gato negro, Laura le
responde que ella trae la mala suerte de casa. La vidente le dice que este
gato, no trae mala suerte si no, amor. Más tarde Laura ve a Martín con una tarjeta
en la que pone “el gato negro” y le pregunta qué es eso. Martín le explica que
es un restaurante, al que va ir a cenar esta noche. Laura no queda muy conforme
y hace ir a la vidente a su casa para que le eche las cartas. Le dice que ve
mucho aburrimiento y soledad en su vida. Según Laura es imposible, porque entre
el trabajo, sus hijos y su ex no le queda tiempo para nada. La mujer le dice
que eso es lo que quiere hacer creer de cara a la galería, pero en el fondo se
siente muy sola. En la siguiente tirada sale el espantapájaros que significa que ve a un hombre en su vida.
Laura le dice que seguramente será su ex. La vidente le aclara, que no tiene
porque ser el, puede ser un amigo o compañero de trabajo. Este hombre, hace
tiempo que quiere acercarse a ella, pero siempre que lo ha intentado no lo ha
dejado. Al día siguiente Laura encuentra en la mesa de Martín un dibujo que
parece un espantapájaros. Mosqueada le pregunta que significa esto. Martín le
dice que ha intentado dibujar a Soto, pero no le ha quedado muy bien. Laura no
le cree y le acusa de haber contratado a la vidente, para que le diga todas
esas cosas, del espantapájaros y del gato negro. Martín no entiende de qué le
habla. Maite va a comer a casa de Laura y en un momento dado se le cae el
bolso, Laura le ayuda a recoger las cosas. Ve un papel dónde pone cosas sobre
Laura: se acaba de separar, tiene dos hijos, hablarle de Martín… con esto
entiende que quien ha contratado a la vidente es Maite y se enfada con ella.
Pasados unos días, Maite le explica a Laura que es cierto que le pidió a una
amiga actriz, que se hiciera pasar por vidente, pero hoy le ha dicho que al
final no pudo ir, y le pidió a una amiga suya que es vidente de verdad, que le
hiciera el favor. Así que todo lo que le dijo no es inventado, es cierto. Laura
no la cree.
Una de esas noches en la que Laura se siente
sola, llama alguien por teléfono. Al día siguiente se despierta en su cuarto.
Ve que hay ropa de hombre tirada por el suelo. La puerta del baño esta
entreabierta, hay alguien duchándose, ella parece arrepentida de lo que ha
pasado.
1x4 EL MISTERIO DE LA ESCENA DEL CRIMEN
Caso
La grabación de una obra de teatro para la televisión, se desarrolla con totalidad normalidad. En los palcos esta el equipo técnico y el director de la obra. Al final del segundo acto Margot, la actriz principal se queda sola. Esta sentada en la silla de un despacho. Por detrás aparece una mano cubierta por un guante de piel rojo que sujeta una pistola. Margot dice el nombre de Gabrielle y suenan dos disparos. Acto seguido aparece Rubén, que sigue con el guion. En los palcos tranquilidad porque todo se desarrolla según lo previsto. Hasta que Rubén se da cuenta que han disparado a Margot de verdad y está muerta.
Jacobo consigue que le asignen el caso a Laura, porque en la obra trabaja alguien que ella conoce: Maite. Laura y Martín llegan a la escena del crimen. Laura pregunta quien tenía que hacer los disparos de fogueo. El tramoyista le dice que él, pero minutos antes, alguien le golpeo y lo dejo inconsciente. Laura le comenta a Martín que es imposible que nadie haya visto nada. Entonces aparece Victoria diciendo que vio al asesino. Maite la ha enchufado para que trabaje en el catering de la obra. Martín le pregunta que como es posible que viera al asesino y no diera aviso. Victoria les aclara que vio alguien vestido igual que el asesino en la obra, por eso no dijo nada. Martín les pregunta al reparto donde se encontraban en el momento del crimen. Todos estaban en sus camerinos, excepto Rubén, que tenía que estar prevenido para entrar en escena, pero se encontraba justo en el lado contrario donde se produjeron los disparos.
Laura y Martín con la ayuda de Maite inspeccionan el camerino de Margot. Laura se fija en una caja fuerte, Maite le dice que ahí guardaba las joyas de la familia, que también utilizaba en las obras. Martín se da cuenta que la caja ha sido forzada. Laura ve un cenicero con restos de papeles quemados. Maite le explica que esta mañana Margot recibió una carta y que cuando la leyó se puso muy nerviosa. Laura ve un trozo de papel, dónde se ve dibujado lo que parece un escudo y lo manda analizar. Maite también le hace saber que el nombre que dijo antes de morir, Gabrielle, no está en el guión.
Martín interroga a Rubén. Se da cuenta que esta cojo y le pregunta que le ha pasado. Este le explica que el día del crimen Margot tuvo una discusión muy fuerte con Julián Castro, marido y Director de la obra. Durante la discusión Margot cogió una pistola de clavos que estaba en su camerino, quiso hacer daño a su marido con la pistola, Rubén se interpuso y le acabo clavando un clavo en el pie. Martín le comenta que le parece extraño, que teniendo el pie así no haya cogido la baja. Él le dice que no ha dado tiempo a buscar otro actor, además no quería decepcionar a Margot.
Laura y Martín van hablar con el director para saber de que discutió con su mujer. El hombre les explica que Margot le compro todos los derechos de sus obras, y ahora el los quería recuperar, ella accedió, pero el día de su muerte le dijo que cambio de opinión, y de eso discutieron.
Antes de volver a comisaria Laura echa un vistazo al escenario, se fija en un cuadro donde ve reflejado a Martín. Cree que Margot vio al asesino reflejado en el cuadro y por eso dijo el nombre de Gabrielle. Laura le pregunta a Martín si cree que este teatro tendrá trampillas, el no entiende a que se refiere. Ella para explicárselo tira de una cuerda, el suelo donde esta Martín se abre y cae en una trampilla. Martín se ha fracturado el brazo. A pesar de que dice que está bien y que puede seguir trabajando, Jacobo ve una oportunidad de oro para separar a Martín de Laura, y así evitar que pasen tanto tiempo juntos. Le insiste en que coja la baja, y a Laura le pone de compañero a Cuevas.
Laura y Cuevas interrogan a Germán, actor y tío de Margot. Se fijan que en la mano derecha tiene unos fuertes temblores, y llegan a la conclusión de que con esos temblores no pudo disparar la pistola. Lidia le dice a Laura que de la vestimenta del asesino de la obra han encontrado el gorro y la gabardina, pero ni rastro de los guantes rojos, y del papel que mando analizar no han podido saber que era.
Laura vuelve a ir al teatro acompañada de Cuevas y en la entrada se encuentran con Eva una de las actrices. Le pregunta donde se encontraba en el momento del crimen. Eva le dice que estaba en su camerino, y le insinúa que no pensara que ella mato a Margot. Laura responde que motivos no le faltan, ya que Margot siempre le asignaba papeles secundarios. En ese momento llega unos de los técnicos y le enseña el nuevo cartel, Eva ha pasado a ser la protagonista.
Laura esta ojeando la revista Cotilla, y en ella ve una entrevista de Rubén. En la foto ve que el chico lleva un anillo de Margot. Laura hace venir a Rubén a comisaria, para preguntarle por el anillo. Jacobo le expone dos opciones: se lo robó, o bien se lo regalo porque eran amantes. Este reconoce que estaban enamorados, les asegura que no la mato. Jacobo le advierte que su cojera le está librando de una acusación de asesinato. Fuera está esperando la encargada de estilismo que no deja de mirar a Rubén y Laura se da cuenta. Le comenta que es difícil de olvidar alguien a quien se ha querido. La chica le reconoce que estuvieron juntos, hasta que él se encapricho de Margot. Laura se fija que lleva unos trajes y le pregunta si son de Germán. Esta se queda parada y Laura le dice que lo ha sabido por las manchas, que seguramente con los temblores se las hace a diario. La chica le explica que estas manchas son antiguas, con la nueva medicación los temblores le han desaparecido por completo.
Laura y Cuevas vuelven a interrogar a Germán este les pregunta por qué iba a matar a su sobrina. Laura le explica que han descubierto que Margot lo quería incapacitar. Con la nueva medicación los temblores habían desaparecido y si pudo disparar la pistola. Luego dejo de tomar la medicación, para que le volvieran los temblores y así crearse una cuartada. Germán les explica que el día en que murió su sobrina, la medicación le desapareció, como prueba les muestra la receta que tuvo que ir a pedir al hospital.
Laura esta en el teatro con Maite, ella le expone su teoría: el marido quería recuperar los derechos de sus obras, abrió la caja fuerte, y al ver que el contrato no estaba allí, acelero el proceso matándola. Laura le comenta, que en el momento del crimen, el marido estaba en el palco, es imposible que fuera al escenario sin que nadie le viera. En ese momento aparece Cuevas y le dice que ha encontrado un pasadizo que une el palco con el escenario. Laura cita al marido en comisaría. Les reconoce que forzó la caja fuerte, pero no le hizo falta matar a su mujer porque el contrato si, estaba allí.
Laura se encuentra con Maite y Martín en bar de Victoria. Cuando llega esta. Martín se da cuenta que Victoria lleva los mismos guantes que el asesino. Ella al oír esto se los quita rápidamente y se los da a Laura, diciéndole que se los ha encontrado en la papelera del camerino de Eva. Ante esta prueba Eva queda detenida.
Con cierta ironía Lidia felicita a Laura por resolver el caso, ya que al analizar los guantes han encontrado una huella de Eva. A pesar de ello Laura no está nada convencida. Cuevas le trae la prueba definitiva. Ha estado revisando los carteles de todas las obras. En una de ellas ha visto que Eva interpretaba el papel de Gabrielle. Cuevas cree que Margot acuso del asesinato a Eva por el nombre de un personaje. Laura no queda nada convencida y vuelve al teatro. Entra en la habitación donde se guarda el equipo técnico. En el suelo encuentra un lápiz mordido, se lo guarda. Se encuentra con el tramoyista que va con la máquina de clavos. Laura le comenta que debería ir con cuidado con esos trastos. El hombre le responde que siempre lo tiene. Laura le dice que eso no es así, porque el otro día había una maquina de esas en el camerino de Margot. Él le explica que no fue cosa suya, alguien la cogió y luego la dejo tirada por ahí. Al decir esto Laura lo comprende todo.
1x4 EL MISTERIO DE LA ESCENA DEL CRIMEN
Caso
La grabación de una obra de teatro para la televisión, se desarrolla con totalidad normalidad. En los palcos esta el equipo técnico y el director de la obra. Al final del segundo acto Margot, la actriz principal se queda sola. Esta sentada en la silla de un despacho. Por detrás aparece una mano cubierta por un guante de piel rojo que sujeta una pistola. Margot dice el nombre de Gabrielle y suenan dos disparos. Acto seguido aparece Rubén, que sigue con el guion. En los palcos tranquilidad porque todo se desarrolla según lo previsto. Hasta que Rubén se da cuenta que han disparado a Margot de verdad y está muerta.
Jacobo consigue que le asignen el caso a Laura, porque en la obra trabaja alguien que ella conoce: Maite. Laura y Martín llegan a la escena del crimen. Laura pregunta quien tenía que hacer los disparos de fogueo. El tramoyista le dice que él, pero minutos antes, alguien le golpeo y lo dejo inconsciente. Laura le comenta a Martín que es imposible que nadie haya visto nada. Entonces aparece Victoria diciendo que vio al asesino. Maite la ha enchufado para que trabaje en el catering de la obra. Martín le pregunta que como es posible que viera al asesino y no diera aviso. Victoria les aclara que vio alguien vestido igual que el asesino en la obra, por eso no dijo nada. Martín les pregunta al reparto donde se encontraban en el momento del crimen. Todos estaban en sus camerinos, excepto Rubén, que tenía que estar prevenido para entrar en escena, pero se encontraba justo en el lado contrario donde se produjeron los disparos.
Laura y Martín con la ayuda de Maite inspeccionan el camerino de Margot. Laura se fija en una caja fuerte, Maite le dice que ahí guardaba las joyas de la familia, que también utilizaba en las obras. Martín se da cuenta que la caja ha sido forzada. Laura ve un cenicero con restos de papeles quemados. Maite le explica que esta mañana Margot recibió una carta y que cuando la leyó se puso muy nerviosa. Laura ve un trozo de papel, dónde se ve dibujado lo que parece un escudo y lo manda analizar. Maite también le hace saber que el nombre que dijo antes de morir, Gabrielle, no está en el guión.
Martín interroga a Rubén. Se da cuenta que esta cojo y le pregunta que le ha pasado. Este le explica que el día del crimen Margot tuvo una discusión muy fuerte con Julián Castro, marido y Director de la obra. Durante la discusión Margot cogió una pistola de clavos que estaba en su camerino, quiso hacer daño a su marido con la pistola, Rubén se interpuso y le acabo clavando un clavo en el pie. Martín le comenta que le parece extraño, que teniendo el pie así no haya cogido la baja. Él le dice que no ha dado tiempo a buscar otro actor, además no quería decepcionar a Margot.
Laura y Martín van hablar con el director para saber de que discutió con su mujer. El hombre les explica que Margot le compro todos los derechos de sus obras, y ahora el los quería recuperar, ella accedió, pero el día de su muerte le dijo que cambio de opinión, y de eso discutieron.
Antes de volver a comisaria Laura echa un vistazo al escenario, se fija en un cuadro donde ve reflejado a Martín. Cree que Margot vio al asesino reflejado en el cuadro y por eso dijo el nombre de Gabrielle. Laura le pregunta a Martín si cree que este teatro tendrá trampillas, el no entiende a que se refiere. Ella para explicárselo tira de una cuerda, el suelo donde esta Martín se abre y cae en una trampilla. Martín se ha fracturado el brazo. A pesar de que dice que está bien y que puede seguir trabajando, Jacobo ve una oportunidad de oro para separar a Martín de Laura, y así evitar que pasen tanto tiempo juntos. Le insiste en que coja la baja, y a Laura le pone de compañero a Cuevas.
Laura y Cuevas interrogan a Germán, actor y tío de Margot. Se fijan que en la mano derecha tiene unos fuertes temblores, y llegan a la conclusión de que con esos temblores no pudo disparar la pistola. Lidia le dice a Laura que de la vestimenta del asesino de la obra han encontrado el gorro y la gabardina, pero ni rastro de los guantes rojos, y del papel que mando analizar no han podido saber que era.
Laura vuelve a ir al teatro acompañada de Cuevas y en la entrada se encuentran con Eva una de las actrices. Le pregunta donde se encontraba en el momento del crimen. Eva le dice que estaba en su camerino, y le insinúa que no pensara que ella mato a Margot. Laura responde que motivos no le faltan, ya que Margot siempre le asignaba papeles secundarios. En ese momento llega unos de los técnicos y le enseña el nuevo cartel, Eva ha pasado a ser la protagonista.
Laura esta ojeando la revista Cotilla, y en ella ve una entrevista de Rubén. En la foto ve que el chico lleva un anillo de Margot. Laura hace venir a Rubén a comisaria, para preguntarle por el anillo. Jacobo le expone dos opciones: se lo robó, o bien se lo regalo porque eran amantes. Este reconoce que estaban enamorados, les asegura que no la mato. Jacobo le advierte que su cojera le está librando de una acusación de asesinato. Fuera está esperando la encargada de estilismo que no deja de mirar a Rubén y Laura se da cuenta. Le comenta que es difícil de olvidar alguien a quien se ha querido. La chica le reconoce que estuvieron juntos, hasta que él se encapricho de Margot. Laura se fija que lleva unos trajes y le pregunta si son de Germán. Esta se queda parada y Laura le dice que lo ha sabido por las manchas, que seguramente con los temblores se las hace a diario. La chica le explica que estas manchas son antiguas, con la nueva medicación los temblores le han desaparecido por completo.
Laura y Cuevas vuelven a interrogar a Germán este les pregunta por qué iba a matar a su sobrina. Laura le explica que han descubierto que Margot lo quería incapacitar. Con la nueva medicación los temblores habían desaparecido y si pudo disparar la pistola. Luego dejo de tomar la medicación, para que le volvieran los temblores y así crearse una cuartada. Germán les explica que el día en que murió su sobrina, la medicación le desapareció, como prueba les muestra la receta que tuvo que ir a pedir al hospital.
Laura esta en el teatro con Maite, ella le expone su teoría: el marido quería recuperar los derechos de sus obras, abrió la caja fuerte, y al ver que el contrato no estaba allí, acelero el proceso matándola. Laura le comenta, que en el momento del crimen, el marido estaba en el palco, es imposible que fuera al escenario sin que nadie le viera. En ese momento aparece Cuevas y le dice que ha encontrado un pasadizo que une el palco con el escenario. Laura cita al marido en comisaría. Les reconoce que forzó la caja fuerte, pero no le hizo falta matar a su mujer porque el contrato si, estaba allí.
Laura se encuentra con Maite y Martín en bar de Victoria. Cuando llega esta. Martín se da cuenta que Victoria lleva los mismos guantes que el asesino. Ella al oír esto se los quita rápidamente y se los da a Laura, diciéndole que se los ha encontrado en la papelera del camerino de Eva. Ante esta prueba Eva queda detenida.
Con cierta ironía Lidia felicita a Laura por resolver el caso, ya que al analizar los guantes han encontrado una huella de Eva. A pesar de ello Laura no está nada convencida. Cuevas le trae la prueba definitiva. Ha estado revisando los carteles de todas las obras. En una de ellas ha visto que Eva interpretaba el papel de Gabrielle. Cuevas cree que Margot acuso del asesinato a Eva por el nombre de un personaje. Laura no queda nada convencida y vuelve al teatro. Entra en la habitación donde se guarda el equipo técnico. En el suelo encuentra un lápiz mordido, se lo guarda. Se encuentra con el tramoyista que va con la máquina de clavos. Laura le comenta que debería ir con cuidado con esos trastos. El hombre le responde que siempre lo tiene. Laura le dice que eso no es así, porque el otro día había una maquina de esas en el camerino de Margot. Él le explica que no fue cosa suya, alguien la cogió y luego la dejo tirada por ahí. Al decir esto Laura lo comprende todo.
Resolución
Al día siguiente Laura y Cuevas están en el camerino de Margot,
buscando algo agachados en el suelo. Llega Jacobo y le dice que los sospechosos
la están esperando en el escenario. Parece que Cuevas ha encontrado lo que
buscaban. Laura va al escenario y empieza su relato:
Lo primero que pensó es que Margot vio reflejado al asesino en el
cuadro y que por eso dijo el nombre de Gabrielle. Pero aquella noche las luces
estaban dispuestas de otra forma. Le pide a Cuevas que ponga las luces como
estaban aquella noche. Al hacerlo todos pueden comprobar que en el cuadro no se
ve ningún reflejo, y que por lo tanto Margot no pudo ver al asesino. Aquella
mañana Margot recibió una carta que la puso muy nerviosa y que luego quemo.
Eran los resultados médicos que le confirmaban que tenía una enfermedad
terminal, y le quedaba poco tiempo de vida. Lo sabe porque el escudo que mando
analizar es el mismo que hay en la receta de Germán. Margot quería morir sobre
el escenario y le pidió a Rubén que la matará. Este se escuda que estando cojo,
no le podía dar a tiempo a cruzar el escenario y matar a Margot. Laura les
explica que aquella mañana Margot provoco una discusión con su marido. Tal como
tenían planeado Rubén se interpuso, pero lo del clavo fue un efecto, no se lo
clavo de verdad. Jacobo les enseña el clavo, que han encontrado en el camerino
de Margot. Les dice que no hace falta un análisis para ver que no tiene restos
de sangre. Rubén tuvo tiempo de cruzar el escenario, cambiar las balas de
fogueo, vestirse como el asesino, golpear al tramoyista y disparar a Margot.
Después, para tener cuartada se tomo los analgésicos de Germán, y se disparo un
clavo en el pie, esta vez de verdad. Para soportar el dolor se puso un lápiz en
la boca y lo mordió. Tras el asesinato hubo mucho revuelo, seguramente por una
confusión, alguien tiro los guantes en la papelera de Eva. Maite le pregunta a
Laura que si Margot no vio al asesino, como es que dijo el nombre de Gabrielle,
es decir el de Eva. Laura le explica que Margot sabía que cuando muriese le
iban a dar el papel protagonista a Eva. Quiso impedirlo acusándola del
asesinato.
Trama personal
Laura quiere sacar de su habitación, al hombre
con el que ha pasado la noche sin que los niños lo vean. Pero cuando va al
comedor estos ya están despiertos viendo la tele. Lo saca en albornoz y con una
toalla en la cabeza para que no sepan quién es. En comisaria Jacobo ve como Lidia pega una bofetada a un hombre. Jacobo le pregunta quién es
ese. Ella le explica que ha estado saliendo con él, y ha descubierto que está
casado y tiene tres hijos. Jacobo la ve muy mal y le propone ir a cenar a un
mexicano. Desde allí llama a Laura, le dice que no va a poder cenar con ella,
porque está en una reunión con Félix. Laura escucha las rancheras y no se lo
acaba de creer. En ese momento llega la camarera y le avisa que la grúa se está
llevando su coche. Al día siguiente Jacobo le pide a Cuevas que le anule la
multa. Mientras que Laura le pide que compruebe si cerca de esa calle hay un
mexicano. Efectivamente lo hay. Cuando Laura regresa a comisaria se encuentra
una cajita encima de la mesa. Es un anillo acompañado por una nota: “Ayer tu
pusiste la primera piedra, hoy yo pongo la segunda” en ese momento llega Lidia,
y se sorprende de ver que tiene un admirador. Aun así, le dice que hace bien,
porque lo único que consiguió del suyo, es que la llevara a cenar a un
mexicano. Esta es la última pieza, que le faltaba a Laura para encajar el
rompecabezas. Queda con Jacobo. Le dice que sabe que está con Lidia. La otra
noche se lo pasaron muy bien, pero ella no tiene edad, para pasárselo bien, si
no, para estar bien. Y le devuelve el anillo.
Los gemelos se tienen que ir con el colegio de excursión y llegan tarde.
Laura les pide que espabilen. Estos le responden que no se pueden mover del
suelo. Laura pensándose que es broma, los tira del brazo, y efectivamente no se
pueden mover. Se han puesto pegamento en los zapatos, y ahora no hay quien los
despegue. Laura llega tarde a trabajar, y Martín aprovechando que está de baja,
se ofrece a quedarse con ellos. Cuando consigue despegarlos, como han perdido
el autocar se los lleva a comisaria. A Jacobo no le hace ninguna gracia ver que
Laura ha dejado sus hijos a cargo de Martín, y le advierte que lo estará
vigilando. Al darse la vuelta se da cuenta que los niños han desaparecido. Los
busca por toda la comisaria. Hasta que un compañero desesperado le dice, que
tiene liada una buena en la sala de interrogatorios. Alguien ha puesto
pegamento en el asiento, y el sospechoso no se puede mover. Además le ha
desaparecido las llaves del coche patrulla. Martín baja al parking, y están
metidos en el coche patrulla, no puede abrir la puerta porque se han encerrado
por dentro. Martín para convencerles de que salgan les dice, que los llevara al
cine, a ver la película que ellos quieran. En la cola del cine Martín ve una
chica que le gusta, y empieza a tontear con ella. La mujer lo invita a tomar un
café. Él le dice que no puede porque tiene que ir a ver la película con los
gemelos. Ella le pregunta que gemelos, Martín se gira para señalárselos, y ve
que han vuelto a desaparecer. Los buscan por todo el centro comercial. La chica
le dice que ha dado aviso a megafonía para que digan sus nombres. Mientras
Martín llama a Laura, salta el buzón de voz, le dice que van a ir al cine y
llegaran tarde. En ese momento dicen los nombres de Javier y Carlos por
megafonía. Justo aparecen los niños. Martín cabreado les pregunta donde estaban, y ellos le dicen que ya han visto la película.
La mujer le da su tarjeta, por si algún día le apetece llamarle .Cuando llegan
a casa, Laura los está esperando con la merienda preparada. Ve que tiene un
mensaje de voz, al escucharlo le dice a Martín que perdió a sus hijos en un
centro comercial. Este le pregunta cómo puede saberlo, si en el mensaje no dijo
nada. Laura le dice que el no, pero la de megafonía sí. Martín se justifica
diciéndole que no paran quietos. Laura le responde que no se enfada porque los
haya perdido, si no porque tenía la opción de contárselo y decidió
mentirle.
1x5 EL MISTERIO DEL LORO AZUl
Caso:
El servicio de noche del restaurante el Loro Azul se desarrolla con normalidad. El Chef, Ignacio Requena, le dice a su Subchef que no entiende que hace aquí, si lo había despedido este mediodía. Wilson le reprocha que no lo puede despedir por lo que ha pasado. Ignacio le responde que mañana no lo quiere ver aquí. Ignacio sale a la sala, en una de las mesas esta Yulen amigo, y competencia directa, ya que también es Chef. Hablan sobre lo que ha pasado este mediodía, y después se dirige hacia su despacho, en estas, Luis, critico culinario le dice que le gustaría hablar con él. Ignacio se lo quita de encima, diciéndole que ahora no es el momento. Cuando llega al despacho saluda a su loro azul. De un cajón saca una caja de metal donde hay un frasco y una jeringuilla. Una hora después Wilson le dice a Carmen, (la mujer de Ignacio) que necesita entrar en el almacén. Ella sube al despacho a por las llaves. Al llegar se lo encuentra tirado en el suelo, muerto. Mientras que el loro no para de repetir: Me vas a matar? No pienso pedirte perdón.
Laura está en su casa con Maite preparando un plato del recetario de Ignacio. La receta no les ha quedado igual. Laura decide ir al restaurante para quejarse. Llega en pleno velatorio. En el que también esta Félix, era amigo del Chef. Laura le pregunta de que ha muerto, Félix le dice que de un infarto, desde hace años tenía problemas de corazón. Félix le presenta a Carmen y a Flora, prima de Ignacio. Laura se fija en el loro que tienen encima de una de las mesas, que no para de repetir me vas a matar? No pienso pedirte perdón. Carmen le explica que cada tarde su marido le ponía desheredada y no para de repetir las frases del culebrón. Laura le comenta que ella ha visto todos los capítulos y no le suenan esas frases. Al poco rato el loro aparece muerto. Carmen le pide a uno de sus empleados que lo tire a la basura.
Después del velatorio Carmen sale a fumar. Ve que el cubo de la basura se mueve, de él, sale Laura con el loro en la mano. Solicita que le hagan la autopsia. Los resultados revelan que fue envenenado. Laura se lo explica a Jacobo y le pide que pare la incineración de Ignacio, está convencida que el dueño también fue envenenado y que el loro lo vio, por eso decía esas frases tan raras. Jacobo le dice que no piensa parar una incineración, porque un loro haya muerto envenenado. Martín explica las sospechas de Laura a Félix y para la incineración. Al cabo de unos días Martín hace saber a Laura que tenía razón, Ignacio fue envenenado.
Al llegar al restaurante, Lidia los pone al corriente de lo que sabe. Ignacio tomaba parina por sus problemas de corazón. Ha revisado la medicación y falta un frasco, seguramente el asesino dio el cambiazo. Tiene a Cuevas buscando la parina que falta en la basura. Al poco llega con el frasco. Laura comenta que tendrán que revisar las cámaras de seguridad para saber quien entro en el despacho a la hora del crimen. Lidia le dice que tendrá que interrogar a todos, ya que el restaurante no tiene cámaras de seguridad. Laura acompañada de Martín, sale al pasillo y empieza a buscar la cámara. Finalmente la encuentran detrás de un cuadro. La cámara muestra que a la hora del crimen, entraron cuatro personas: Carmen, Wilson, Yulen y Luis. Los interrogan y de momento no sacan nada en claro.
Flora se presenta en comisaría para saber si es verdad que mataron a su primo, Laura se lo confirma. Flora le empieza a contar su vida. Le explica que hace unos años ella y Ignacio abrieron un restaurante de comida tradicional, pero cuando él decidió irse a Madrid vendió su parte a un desgraciado, que llevo el negocio a la quiebra y la dejo en la ruina. Antes de irse Flora le da un bombón a Laura, ella le dice que esta buenísimo, y la mujer toda orgullosa, le hace saber que es una receta original suya. Lidia descubre que el día en que murió Ignacio hubo una pequeña intoxicación en el restaurante. Cinco personas pidieron rape con almendras, y las almendras estaban en mal estado. Lo raro es que solo se presentaron cuatro denuncias. El plato lo preparo Wilson.
Laura y Martín van al restaurante para hablar con Wilson que ahora es el Chef. Laura le dice que saben lo de la intoxicación, y que Ignacio lo quería despedir. El chico se justifica diciendo que las almendras se las compro a Yulen, jamás pensó que siendo amigo de Ignacio le vendiera almendras en mal estado. Laura va hablar con Yulen. Este le explica que él e Ignacio se solían hacer jugarretas de este tipo, pero siempre de buen rollo, de hecho al mediodía fue hablar con él. Pero no pudo hacerlo, vio a alguien y se puso muy nervioso. Por la noche volvió al restaurante y lo aclararon todo. Pero la jugada no le salió bien, porque a pesar de la intoxicación, Luis escribió una buena crítica del plato. Laura le comenta que vio una entrevista donde trataba a Ignacio de vendido. Yulen le responde que lo era, porque mucho defender la cocina moderna, pero luego publico un libro de recetas tradicionales.
Laura va al restaurante donde Luis está impartiendo un curso de vinos. Mientras espera a que acabe, prueba todos los vinos. Cuando acaba la charla, Laura un poco achispada le pregunta cómo pudo escribir una crítica tan buena de un plato tan malo. Luis le dice que el suyo no estaba malo. Laura le responde que si lo estaba, la primera vez que lo interrogo le vio los salpullidos en el brazo. Laura le saca un vino de brik y le pregunta en qué se diferencia este vino de los otros. El hombre le responde que en muchas cosas que ella no sabría apreciar. Laura le dice que él tampoco, porque le ha puesto de ese vino en su copa, lo ha probado y no se ha dado cuenta.
Maite queda a comer con Laura en el bar de Victoria. Le explica que desde hace unos meses viene un hombre al bar cada día. Al principio se pensaba que lo hacía para verla a ella. Hasta que hablo con él y le reconoció que venía por Laura. Se llama Ismael, y lo ha citado aquí para que se conozcan. En ese momento, llega Ismael, Maite los presenta y se va. Ismael le comenta a Laura que ha tenido un día de perros porque un Municipal le ha puesto una multa, a partir de aquí empieza hablar mal de los policías. Ismael le pide disculpas, y le pregunta a que se dedica. Laura no se atreve a decirle que es policía, y le dice que es contable. En ese momento recibe una llamada de Flora. Le explica que ha recibido una carta de Ignacio, escrita el mismo día que murió. Laura le pregunta que dice la carta. Flora le responde que no lo sabe, porque no encuentra las gafas para leer. Laura le dice que ahora va para allá. Se despide de Ismael, este le dice que le gustaría invitarla a cenar esta noche, Laura acepta.
Cuando Laura llega al restaurante se encuentra a Flora dormida, sentada en una silla, la mueve un poquito para despertarla, pero no reacciona. Carmen se acerca y le pregunta si está muerta. Laura le pone un dedo bajo la nariz y comprueba que aun respira. Carmen avisa a una ambulancia. Flora se despierta, le dice que sintió un pinchazo en el cuello, y no recuerda nada más. Laura le pregunta dónde está la carta, ella le responde que en el bolso. Laura mira, pero no la encuentra. Va al despacho de Ignacio. Llega Flora le explica que el médico le ha dicho que está perfectamente, se queda mirando el despacho y le comenta que nunca había estado en el. Empiezan hablar de lo ocurrido, mientras Flora ordena el despacho, coloca cada cosa en su sitio.
A Ismael no se le ocurre otro sitio donde llevar a Laura a cenar que al Loro Azul. Antes de cenar Ismael se le declara. Laura le dice que vaya pidiendo la cena, mientras ella va un momento al baño. En realidad va al pasillo para llamar a Maite. Le explica que le ha mentido y no sabe cómo pararlo. Por los conductos de ventilación oye a Carmen hablando por teléfono. Cuando sale del despacho, Laura lo aprovecha para colarse. Mira en los cajones y en unos de ellos encuentra un frasco que contiene un líquido, una jeringuilla y las gafas de Flora. Llama a Jacobo y le pide que vaya al restaurante. Cuando Laura está a punto de contarle a Ismael que es policía, llega Jacobo y detiene a Carmen. Ismael se acerca para preguntar qué pasa. Jacobo que se ha dado cuenta de que Ismael esta con Laura, le responde de malos modos. Ismael le pregunta quien se ha creído que es para hablarle así, entonces los tres dicen a la vez que son policías.
Una vez en comisaria Laura hace saber a Carmen que han analizado el frasco que ha encontrado en su despacho, y contiene el veneno que utilizaron para matar a Ignacio, al loro y a Flora. Ella insiste en que alguien lo habrá dejado allí, para inculparla. Laura le pregunta desde cuando son amantes, ella y Wilson. Lo supo por las grabaciones de la cámara de seguridad. Wilson entro unos minutos antes en el despacho que ella, y después ella salió antes, y con el vestido desabrochado. Carmen le reconoce que hace unos seis meses que se ven. Su marido obviamente no lo sabía porque si no, la habría echado del restaurante. Laura está en casa ayudando a sus hijos a ordenar el cuarto, colocando cada cosa en su sitio, y así resuelve el caso.
Resolución
Laura reúne a los sospechosos en el restaurante y empieza su relato:
En un principio pensaron que el veneno estaba en la medicación, pero no, estaba en la jeringuilla. Luego esta lo de la intoxicación cinco personas pidieron el plato y solo cuatro denunciaron. Hubo una quinta persona que no denuncio, porque no quería que se supiera que había estado aquel día en el restaurante. Laura le levanta la manga de la blusa a Flora, y en el brazo se pueden apreciar todavía los salpullidos. Flora odiaba a Ignacio, no solamente porque la arruinara con el restaurante, también porque las recetas que publico, en el libro de cocina tradicional eran suyas. Lo supo, porque una de las recetas del libro son los bombones que le dio aprobar, y ella misma le dijo que era una receta original suya. Cuando Flora supo lo que Ignacio estaba haciendo le llamo para intentar que recapacitara. Ignacio hablo con el manos libres, y por eso el loro escucho la conversación. Al no poderlo convencer, aquel día fue al restaurante, Ignacio la vio, y por eso se puso nervioso, cuando estaba hablando con Yulen. Entro en el despacho y puso el veneno en la jeringuilla. De esto Laura se dio cuenta, porque Flora le dijo que nuca había estado en el despacho, sin embargo mientras hablaban lo ordeno y solo podía saber donde iba cada cosa, si antes había estado allí. En el velatorio el loro empezó a repetir las frases de la conversación, y viendo que esto la podía delatar lo enveneno. También se invento lo de la carta de Ignacio, y se inyecto veneno, en una dosis menor, para culpar a Carmen. Porque si Carmen iba a la cárcel, el restaurante y los derechos del libro de cocina pasaban a ella, al ser el familiar más directo. Flora se alegra de quedar detenida, así todo el mundo sabrá porque lo mato.
Trama personal
Ismael le cuenta a Laura que no le dijo que era policía, porque es de la secreta. Llevaba infiltrado en el barrio un par de meses. Sin embargo ella no tenia motivo para mentirle. Laura le reconoce que al oírlo hablar mal de los policías, no se atrevió a decírselo. Ismael le aclara que se refería a los municipales. Le dice que por motivos de trabajo estará bastante tiempo fuera, y no podrán verse. Así que se despiden. Jacobo le pregunta a Laura por Ismael, ella le dice que le gusta, y le piensa dar una oportunidad. Jacobo al ver que no tiene nada que hacer, se quita el anillo de casado y se va con Lidia.
Maite ha rodado un anuncio, Victoria consigue la cinta, y organiza un pase, para verlo todos juntos en el bar. El anuncio es de un aparato para hacer abdominales, Victoria no para de mofarse de ella, y Maite se acaba marchando llorando. Al día siguiente Maite continua desanimada, cuando llega Victoria con un paquete, Martín se lo quita. Es el aparato para hacer gimnasia. Esto le levanta un poco el ánimo. Laura queda con Maite para dar una vuelta, le va diciendo nombres de actores, que empezaron su carrera haciendo publicidad, pero ni así consigue animarla. Maite se marcha para casa. Laura llama a Martín y le propone de ir a tomar unas copas. Este le dice que no puede, porque ha quedado con unos amigos. Laura se gira, y a una distancia prudencial lo ve, en actitud cariñosa con una mujer, le dice que no pasa nada y se va.
1x6 EL MISTERIO DEL CADÁVER ANUNCIADO
1x5 EL MISTERIO DEL LORO AZUl
Caso:
El servicio de noche del restaurante el Loro Azul se desarrolla con normalidad. El Chef, Ignacio Requena, le dice a su Subchef que no entiende que hace aquí, si lo había despedido este mediodía. Wilson le reprocha que no lo puede despedir por lo que ha pasado. Ignacio le responde que mañana no lo quiere ver aquí. Ignacio sale a la sala, en una de las mesas esta Yulen amigo, y competencia directa, ya que también es Chef. Hablan sobre lo que ha pasado este mediodía, y después se dirige hacia su despacho, en estas, Luis, critico culinario le dice que le gustaría hablar con él. Ignacio se lo quita de encima, diciéndole que ahora no es el momento. Cuando llega al despacho saluda a su loro azul. De un cajón saca una caja de metal donde hay un frasco y una jeringuilla. Una hora después Wilson le dice a Carmen, (la mujer de Ignacio) que necesita entrar en el almacén. Ella sube al despacho a por las llaves. Al llegar se lo encuentra tirado en el suelo, muerto. Mientras que el loro no para de repetir: Me vas a matar? No pienso pedirte perdón.
Laura está en su casa con Maite preparando un plato del recetario de Ignacio. La receta no les ha quedado igual. Laura decide ir al restaurante para quejarse. Llega en pleno velatorio. En el que también esta Félix, era amigo del Chef. Laura le pregunta de que ha muerto, Félix le dice que de un infarto, desde hace años tenía problemas de corazón. Félix le presenta a Carmen y a Flora, prima de Ignacio. Laura se fija en el loro que tienen encima de una de las mesas, que no para de repetir me vas a matar? No pienso pedirte perdón. Carmen le explica que cada tarde su marido le ponía desheredada y no para de repetir las frases del culebrón. Laura le comenta que ella ha visto todos los capítulos y no le suenan esas frases. Al poco rato el loro aparece muerto. Carmen le pide a uno de sus empleados que lo tire a la basura.
Después del velatorio Carmen sale a fumar. Ve que el cubo de la basura se mueve, de él, sale Laura con el loro en la mano. Solicita que le hagan la autopsia. Los resultados revelan que fue envenenado. Laura se lo explica a Jacobo y le pide que pare la incineración de Ignacio, está convencida que el dueño también fue envenenado y que el loro lo vio, por eso decía esas frases tan raras. Jacobo le dice que no piensa parar una incineración, porque un loro haya muerto envenenado. Martín explica las sospechas de Laura a Félix y para la incineración. Al cabo de unos días Martín hace saber a Laura que tenía razón, Ignacio fue envenenado.
Al llegar al restaurante, Lidia los pone al corriente de lo que sabe. Ignacio tomaba parina por sus problemas de corazón. Ha revisado la medicación y falta un frasco, seguramente el asesino dio el cambiazo. Tiene a Cuevas buscando la parina que falta en la basura. Al poco llega con el frasco. Laura comenta que tendrán que revisar las cámaras de seguridad para saber quien entro en el despacho a la hora del crimen. Lidia le dice que tendrá que interrogar a todos, ya que el restaurante no tiene cámaras de seguridad. Laura acompañada de Martín, sale al pasillo y empieza a buscar la cámara. Finalmente la encuentran detrás de un cuadro. La cámara muestra que a la hora del crimen, entraron cuatro personas: Carmen, Wilson, Yulen y Luis. Los interrogan y de momento no sacan nada en claro.
Flora se presenta en comisaría para saber si es verdad que mataron a su primo, Laura se lo confirma. Flora le empieza a contar su vida. Le explica que hace unos años ella y Ignacio abrieron un restaurante de comida tradicional, pero cuando él decidió irse a Madrid vendió su parte a un desgraciado, que llevo el negocio a la quiebra y la dejo en la ruina. Antes de irse Flora le da un bombón a Laura, ella le dice que esta buenísimo, y la mujer toda orgullosa, le hace saber que es una receta original suya. Lidia descubre que el día en que murió Ignacio hubo una pequeña intoxicación en el restaurante. Cinco personas pidieron rape con almendras, y las almendras estaban en mal estado. Lo raro es que solo se presentaron cuatro denuncias. El plato lo preparo Wilson.
Laura y Martín van al restaurante para hablar con Wilson que ahora es el Chef. Laura le dice que saben lo de la intoxicación, y que Ignacio lo quería despedir. El chico se justifica diciendo que las almendras se las compro a Yulen, jamás pensó que siendo amigo de Ignacio le vendiera almendras en mal estado. Laura va hablar con Yulen. Este le explica que él e Ignacio se solían hacer jugarretas de este tipo, pero siempre de buen rollo, de hecho al mediodía fue hablar con él. Pero no pudo hacerlo, vio a alguien y se puso muy nervioso. Por la noche volvió al restaurante y lo aclararon todo. Pero la jugada no le salió bien, porque a pesar de la intoxicación, Luis escribió una buena crítica del plato. Laura le comenta que vio una entrevista donde trataba a Ignacio de vendido. Yulen le responde que lo era, porque mucho defender la cocina moderna, pero luego publico un libro de recetas tradicionales.
Laura va al restaurante donde Luis está impartiendo un curso de vinos. Mientras espera a que acabe, prueba todos los vinos. Cuando acaba la charla, Laura un poco achispada le pregunta cómo pudo escribir una crítica tan buena de un plato tan malo. Luis le dice que el suyo no estaba malo. Laura le responde que si lo estaba, la primera vez que lo interrogo le vio los salpullidos en el brazo. Laura le saca un vino de brik y le pregunta en qué se diferencia este vino de los otros. El hombre le responde que en muchas cosas que ella no sabría apreciar. Laura le dice que él tampoco, porque le ha puesto de ese vino en su copa, lo ha probado y no se ha dado cuenta.
Maite queda a comer con Laura en el bar de Victoria. Le explica que desde hace unos meses viene un hombre al bar cada día. Al principio se pensaba que lo hacía para verla a ella. Hasta que hablo con él y le reconoció que venía por Laura. Se llama Ismael, y lo ha citado aquí para que se conozcan. En ese momento, llega Ismael, Maite los presenta y se va. Ismael le comenta a Laura que ha tenido un día de perros porque un Municipal le ha puesto una multa, a partir de aquí empieza hablar mal de los policías. Ismael le pide disculpas, y le pregunta a que se dedica. Laura no se atreve a decirle que es policía, y le dice que es contable. En ese momento recibe una llamada de Flora. Le explica que ha recibido una carta de Ignacio, escrita el mismo día que murió. Laura le pregunta que dice la carta. Flora le responde que no lo sabe, porque no encuentra las gafas para leer. Laura le dice que ahora va para allá. Se despide de Ismael, este le dice que le gustaría invitarla a cenar esta noche, Laura acepta.
Cuando Laura llega al restaurante se encuentra a Flora dormida, sentada en una silla, la mueve un poquito para despertarla, pero no reacciona. Carmen se acerca y le pregunta si está muerta. Laura le pone un dedo bajo la nariz y comprueba que aun respira. Carmen avisa a una ambulancia. Flora se despierta, le dice que sintió un pinchazo en el cuello, y no recuerda nada más. Laura le pregunta dónde está la carta, ella le responde que en el bolso. Laura mira, pero no la encuentra. Va al despacho de Ignacio. Llega Flora le explica que el médico le ha dicho que está perfectamente, se queda mirando el despacho y le comenta que nunca había estado en el. Empiezan hablar de lo ocurrido, mientras Flora ordena el despacho, coloca cada cosa en su sitio.
A Ismael no se le ocurre otro sitio donde llevar a Laura a cenar que al Loro Azul. Antes de cenar Ismael se le declara. Laura le dice que vaya pidiendo la cena, mientras ella va un momento al baño. En realidad va al pasillo para llamar a Maite. Le explica que le ha mentido y no sabe cómo pararlo. Por los conductos de ventilación oye a Carmen hablando por teléfono. Cuando sale del despacho, Laura lo aprovecha para colarse. Mira en los cajones y en unos de ellos encuentra un frasco que contiene un líquido, una jeringuilla y las gafas de Flora. Llama a Jacobo y le pide que vaya al restaurante. Cuando Laura está a punto de contarle a Ismael que es policía, llega Jacobo y detiene a Carmen. Ismael se acerca para preguntar qué pasa. Jacobo que se ha dado cuenta de que Ismael esta con Laura, le responde de malos modos. Ismael le pregunta quien se ha creído que es para hablarle así, entonces los tres dicen a la vez que son policías.
Una vez en comisaria Laura hace saber a Carmen que han analizado el frasco que ha encontrado en su despacho, y contiene el veneno que utilizaron para matar a Ignacio, al loro y a Flora. Ella insiste en que alguien lo habrá dejado allí, para inculparla. Laura le pregunta desde cuando son amantes, ella y Wilson. Lo supo por las grabaciones de la cámara de seguridad. Wilson entro unos minutos antes en el despacho que ella, y después ella salió antes, y con el vestido desabrochado. Carmen le reconoce que hace unos seis meses que se ven. Su marido obviamente no lo sabía porque si no, la habría echado del restaurante. Laura está en casa ayudando a sus hijos a ordenar el cuarto, colocando cada cosa en su sitio, y así resuelve el caso.
Resolución
Laura reúne a los sospechosos en el restaurante y empieza su relato:
En un principio pensaron que el veneno estaba en la medicación, pero no, estaba en la jeringuilla. Luego esta lo de la intoxicación cinco personas pidieron el plato y solo cuatro denunciaron. Hubo una quinta persona que no denuncio, porque no quería que se supiera que había estado aquel día en el restaurante. Laura le levanta la manga de la blusa a Flora, y en el brazo se pueden apreciar todavía los salpullidos. Flora odiaba a Ignacio, no solamente porque la arruinara con el restaurante, también porque las recetas que publico, en el libro de cocina tradicional eran suyas. Lo supo, porque una de las recetas del libro son los bombones que le dio aprobar, y ella misma le dijo que era una receta original suya. Cuando Flora supo lo que Ignacio estaba haciendo le llamo para intentar que recapacitara. Ignacio hablo con el manos libres, y por eso el loro escucho la conversación. Al no poderlo convencer, aquel día fue al restaurante, Ignacio la vio, y por eso se puso nervioso, cuando estaba hablando con Yulen. Entro en el despacho y puso el veneno en la jeringuilla. De esto Laura se dio cuenta, porque Flora le dijo que nuca había estado en el despacho, sin embargo mientras hablaban lo ordeno y solo podía saber donde iba cada cosa, si antes había estado allí. En el velatorio el loro empezó a repetir las frases de la conversación, y viendo que esto la podía delatar lo enveneno. También se invento lo de la carta de Ignacio, y se inyecto veneno, en una dosis menor, para culpar a Carmen. Porque si Carmen iba a la cárcel, el restaurante y los derechos del libro de cocina pasaban a ella, al ser el familiar más directo. Flora se alegra de quedar detenida, así todo el mundo sabrá porque lo mato.
Trama personal
Ismael le cuenta a Laura que no le dijo que era policía, porque es de la secreta. Llevaba infiltrado en el barrio un par de meses. Sin embargo ella no tenia motivo para mentirle. Laura le reconoce que al oírlo hablar mal de los policías, no se atrevió a decírselo. Ismael le aclara que se refería a los municipales. Le dice que por motivos de trabajo estará bastante tiempo fuera, y no podrán verse. Así que se despiden. Jacobo le pregunta a Laura por Ismael, ella le dice que le gusta, y le piensa dar una oportunidad. Jacobo al ver que no tiene nada que hacer, se quita el anillo de casado y se va con Lidia.
Maite ha rodado un anuncio, Victoria consigue la cinta, y organiza un pase, para verlo todos juntos en el bar. El anuncio es de un aparato para hacer abdominales, Victoria no para de mofarse de ella, y Maite se acaba marchando llorando. Al día siguiente Maite continua desanimada, cuando llega Victoria con un paquete, Martín se lo quita. Es el aparato para hacer gimnasia. Esto le levanta un poco el ánimo. Laura queda con Maite para dar una vuelta, le va diciendo nombres de actores, que empezaron su carrera haciendo publicidad, pero ni así consigue animarla. Maite se marcha para casa. Laura llama a Martín y le propone de ir a tomar unas copas. Este le dice que no puede, porque ha quedado con unos amigos. Laura se gira, y a una distancia prudencial lo ve, en actitud cariñosa con una mujer, le dice que no pasa nada y se va.
1x6 EL MISTERIO DEL CADÁVER ANUNCIADO
Caso
Laura acuesta a sus hijos. Cuando se dispone a irse se tropieza
con un camión de juguete y se cae. Al abrir los ojos se da cuenta que ve
borroso. Sin perder la calma para no asustar a los niños, les pide que les
traiga el teléfono. Llama a Maite. Ella la acompaña al hospital. El médico le
dice que en unas horas recuperara la visión, y le receta unas gotas. De allí se
van al bar de Victoria, ya que Laura no quiere ir a casa, hasta recuperar la
visión, para no preocupar a los niños. Maite deja a Laura en una mesa y se va
ayudar a Victoria. Es entonces cuando Laura escucha una conversación que
proviene de unas mesas más allá. Una mujer le dice a un hombre que tiene que
matar a la chica de la foto. Dice que lo
hará cuando vea fer y suenen los disparos. El hombre en la mano sostiene un
llavero que dentro tiene un cascabel. El hombre le dice que no volverán hablar
del tema hasta que la haya matado. Se levanta y se va. Laura vuelve a escuchar
el sonido del cascabel. Unos minutos después la mujer hace lo propio, no se le
ve la cara ya que la tiene cubierta por una capucha. Al pasar por delante de
Laura, huele su perfume. Laura llama a Maite y la pone al corriente de lo que
ha oído. Le pide que vaya a la mesa a ver que encuentra, Maite solo encuentra
un periódico, en la portada salen cuatro mujeres, Laura está convencida de que
quieren matar a una de esas mujeres.
Una vez ha recuperado la visión, Laura vuelve a casa. Les explica
a Jacobo y Martín, que se han quedado con los niños, la conversación que ha
escuchado. Les enseña la foto. Martín les explica que dos de las mujeres son
tenistas Ivana y Vanesa, este domingo se juegan la final. Las otras dos son
Paula, la entrenadora de Ivana y Miriam la representante de Vanesa. Jacobo no
se toma en serio las sospechas de Laura, Martín le dice que por ir al
campeonato y ver que todo está bien, no pierden nada.
Laura y Martín van al hotel donde se alojan las chicas, primero quieren
hablar con Ivana, el recepcionista les dice que está entrenando, pero no sabe
dónde. En ese momento llega una chica que se presenta como Marta Cambra,
periodista deportiva. Ahora mismo se dirigía donde esta Ivana y se ofrece
acompañarlos. Laura se da cuenta que cojea, la chica le dice que un hueso que
no acaba de soldar bien. Al llegar a la pista de tenis Laura observa que Ivana
juega muy bien, pero cuando ve a Marta se pone nerviosa y empieza a fallar.
Paula su entrenadora, cuando ve a Marta la hecha, alegando que no tiene
acreditación. Martín les explica que se encargan de la seguridad del torneo y
quieren saber, si hanrecibido alguna amenaza. Ivana y Paula se miran dando a entender
que ocultan algo. Una vez en la habitación de hotel, Paula les enseña las
amenazas de muerte que recibe Ivana. Ella misma les dice que cuando las empezó
a recibir se cambio de habitación sin decírselo a nadie, y sin embargo esa
persona lo sabía. Laura se fija que la mesa de la habitación está llena de pastillas
para dormir y tilas. También ve la factura del desayuno lo pide a las seis y
media de la mañana. Laura les dice que si reciben más amenazas se lo hagan
saber, y sobretodo que no se queden solas. Paula le responde que ha contratado
un guardaespaldas que las sigue a todas partes.
Horas más tarde Paula se presenta en comisaría, le explica a Laura
que ella también es objeto de las amenazas. Le enseña los anónimos que ha
recibido. Seguramente el loco la culpa de los últimos partidos que ha perdido Ivana.
Martín le comenta que según la prensa falla en el saque. Paula le dice que para
ella el saque no es importante. Laura le dice a Paula que se ha fijado de que
Ivana es muy maniática y supersticiosa, ella le responde que así es, aunque se
acentuó hace un año, cuando murió su hermano en un accidente de coche.
Al día siguiente Laura y Martín van hablar con Vanesa, le hacen
las mismas preguntas que a Ivana. La chica les dice que de la única que ha
recibido amenazas es de la propia Ivana, la odia a muerte. Más tarde Miriam la
representante de Vanesa va hablar con Laura. Le confirma que lo que ha dicho
Vanesa antes es cierto, Ivana la odia a muerte. Le dice que desde su habitación
por las noches escucha a Ivana pasear de arriba abajo, hablando con alguien por
teléfono, está segura de que esa chica trama algo.
Félix hace saber a Laura que la organización del campeonato se ha quejado, tiene que dejar de investigar, entre otras cosas porque no hay caso. Laura está a punto de dar carpetazo al asunto, cuando llega Cuevas y la anima a seguir. Laura le comenta que en la conversación que escucho decían, que el asesinato se cometería cuando viera fer y empezaran los disparos. Cuevas le dice que entonces tienen que mirar todos los actos públicos, donde vaya a ver fotógrafos, por los disparos de las cámaras. Laura mira los eventos de Ivana y ahora mismo tiene uno en la pista de tenis, es el único con fotógrafos que tiene en toda la semana. Como Martín está hablando por teléfono, Laura se va con Cuevas.
Al llegar, el vigilante les dice que sin identificación no pueden pasar. Laura y Cuevas no encuentran la placa. Mientras tanto Ivana se cuelga la bolsa de las raquetas a la espalda, se agacha para atarse las bambas, y en ese momento se produce el disparo. Cuevas y Laura que ya han conseguido entrar se dirigen corriendo a Ivana, pensándose que es ella quien ha recibido el disparo, pero no, la victima del disparo es Marta, la periodista, que muere poco después.
Jacobo y Félix interrogan a Ivana, Vanesa, Paula y Miriam. Cuando se van, Laura y Martín entran en la sala. Laura huele el mismo perfume que olio en el bar. Está convencida de que unas de las chicas quiere matar a Ivana. Al día siguiente Laura y Martín van al entierro, hablan con la madre. Les dice que su hija ha tenido muy mala suerte, hace un año sufrió un accidente de coche y ahora esto. Laura se va hablar con las chicas, las empieza a oler a todas. Miriam harta de que la huela le pregunta que le pasa, Laura trata de disimular diciéndole que le encanta su perfume, Miriam de su bolso saca un frasco y se lo da, diciéndole que es el perfume que ponen en el hotel. Martín le dice a Laura que con esto no resuelven nada, todas utilizan el mismo perfume.
Félix hace saber a Laura que la organización del campeonato se ha quejado, tiene que dejar de investigar, entre otras cosas porque no hay caso. Laura está a punto de dar carpetazo al asunto, cuando llega Cuevas y la anima a seguir. Laura le comenta que en la conversación que escucho decían, que el asesinato se cometería cuando viera fer y empezaran los disparos. Cuevas le dice que entonces tienen que mirar todos los actos públicos, donde vaya a ver fotógrafos, por los disparos de las cámaras. Laura mira los eventos de Ivana y ahora mismo tiene uno en la pista de tenis, es el único con fotógrafos que tiene en toda la semana. Como Martín está hablando por teléfono, Laura se va con Cuevas.
Al llegar, el vigilante les dice que sin identificación no pueden pasar. Laura y Cuevas no encuentran la placa. Mientras tanto Ivana se cuelga la bolsa de las raquetas a la espalda, se agacha para atarse las bambas, y en ese momento se produce el disparo. Cuevas y Laura que ya han conseguido entrar se dirigen corriendo a Ivana, pensándose que es ella quien ha recibido el disparo, pero no, la victima del disparo es Marta, la periodista, que muere poco después.
Jacobo y Félix interrogan a Ivana, Vanesa, Paula y Miriam. Cuando se van, Laura y Martín entran en la sala. Laura huele el mismo perfume que olio en el bar. Está convencida de que unas de las chicas quiere matar a Ivana. Al día siguiente Laura y Martín van al entierro, hablan con la madre. Les dice que su hija ha tenido muy mala suerte, hace un año sufrió un accidente de coche y ahora esto. Laura se va hablar con las chicas, las empieza a oler a todas. Miriam harta de que la huela le pregunta que le pasa, Laura trata de disimular diciéndole que le encanta su perfume, Miriam de su bolso saca un frasco y se lo da, diciéndole que es el perfume que ponen en el hotel. Martín le dice a Laura que con esto no resuelven nada, todas utilizan el mismo perfume.
En comisaria reciben el aviso de que Ivana y Paula han tenido una
pelea muy fuerte. Martín y Laura van al hotel. La habitación esta toda
revuelta. Laura se da cuenta que las pastillas y las tilas ya no están y que el
desayuno Ivana ahora lo pide a las diez y media. Ella les explica que se han
discutido porque quería anular la final, mientras Paula se negaba por no perder
los tres mil euros del torneo. Cuando terminan de hablar con Ivana, Martín se
dirige a la habitación de Paula, Laura le dice que no está en su habitación si
no, en el bar. Efectivamente esta allí. Laura le dice que Ivana ya la ha puesto
al corriente de lo ocurrido, pero ella no cree que se discutieran por el
torneo, más bien, porque Ivana va a despedirla. En su agenda ha visto que ponía
“a partir del lunes entrenar el saque” justo lo que ella no quería que hiciera.
Paula se lo confirma.
Martín se queda a cenar en casa de Laura, para intentar poner las
cosas en orden. Vanesa podría querer matar a Ivana porque se odian, Paula
porque la va a despedir, pero Miriam no tiene ningún motivo. Laura empieza a
mirar las amenazas que le envían a Ivana, Martín le comenta que se las dejaban
por debajo de la puerta. Con esto ya sabe quien se las envía: Miriam, ella
misma le dijo que oía a Ivana desde su habitación. Seguramente se las enviaba
para ponerla nerviosa y que pierda la final. Ya tienen a las tres con motivos.
Al día siguiente Jacobo llega a casa con los niños y se encuentra
a Martín durmiendo en el sofá, cosa que no le hace ninguna gracia. Laura sale
de su habitación con la biografía de Ivana, les comenta que no han parado de
pasarle desgracias desde hace un año. En ese momento Jacobo recibe una llamada
es Félix, han encontrado muerto al guardaespaldas de Ivana. Laura, Martín y
Jacobo se dirigen al lugar de los hechos. Laura ve que la mano del cadáver
sostiene un llavero, que dentro tiene un cascabel, es el mismo sonido que
escucho en el bar. Se lo queda. Por la tarde se celebra la final. Laura reúne a
las chicas en la sala de espera del torneo, porque ha resuelto el caso.
Resolución
Ivana le dice a Laura que aunque sabe que corre riesgo de que la
maten, piensa salir a jugar. Laura le responde que no se preocupe, el asesino
ya se cobro a su víctima hace dos días. Paula se da cuenta que hace dos días
murió la periodista. Laura les enseña el reportaje que púbico el periódico para
el que trabajaba Marta, tras su muerte. En él, salen todos los partidos de
tenis que ha cubierto, da la casualidad que en todos los partidos de Ivana, que
cubría Marta ella perdía. Por eso pago a su guardaespaldas para que la matara.
Hay que tener en cuenta que para ella la mala suerte es una enfermedad. Les
enseña la bolsa de Ivana donde guarda las raquetas. En ella pone FER. Esa era la señal, cuando el guardaespaldas
viese FER, tenía que disparar, porque justo en ese momento Ivana se iba
agachar. Ivana le dice a Laura que le encantara ver como demuestra ante el juez que la mato
porque le daba mala suerte. Jacobo le dice que tiene razón, la mala suerte no
es un motivo demasiado fuerte, como para matar, pero sí lo es la venganza.
Marta era novia del hermano de Ivana, y era ella quien conducía el coche el día
del accidente. Aunque luego, se cambiara de asiento, para hacer creer que era
él quien conducía. La presencia de Marta en el torneo la estaba volviendo loca,
tanto que tomaba tilas y pastillas para dormir, pero la cosa no le funcionaba,
porque a pesar de ello, pedía el desayuno a las seis y media de la mañana. Tras
la muerte de Marta las tilas y pastillas desaparecieron, y dormía tan bien, que
se permitía pedir el desayuno tres horas más tarde. Luego se deshizo del
guardaespaldas. Cuando salen del torneo Martín le comenta a Laura, que en la
conversación que escucho decían que había que matar a la chica de la foto, y
Marta no sale en ella. Laura le hace ver que para ser la chica de la foto no
hace falta salir en ella, Marta fue quien la hizo.
Trama personal
Cuevas ha formateado todos los ordenadores de
la comisaria, a Lidia le ha borrado unos informes que necesita. Cuevas le dice
que no se preocupe, esta noche pueden quedar y pasar los informes de papel al
ordenador. Por la noche cuando Lidia llega a comisaria se encuentra que Cuevas
le ha preparado una cena romántica. Al chico hace tiempo que le gusta y ya no
sabe qué hacer para llamar su atención. A la mañana siguiente, ya han acabado
de introducir todos los archivos, Cuevas le dice que solo falta introducir los
DNIS. Lidia le pide que lo haga el, porque ella se marcha a casa a darse una
ducha. Cuevas se mete en la base de datos de Lidia para saber su DNI y descubre
que su verdadero nombre es: Mercedes García Lozano.
A Jacobo le toca quedarse el fin de semana con los gemelos. Estos
se pasan el tiempo jugando con la consola que les ha regalado Martín. Jacobo
les propone de salir a dar un paseo, Javier le dice que no, porque si se pasan
esta pantalla aparecerá el duende de los regalos. Jacobo les dice que el duende
no va aparecer porque está en comisaria esperándolos. Estos se ponen como
locos, y quieren ir cuanto antes. Cuando llegan, le preguntan a Lidia si ha
visto al duende. Ella les dice que ha estado aquí, pero se ha ido, le ha dejado
una bolsa de caramelos y un sobre para ellos. En la nota pone que los espera en
el bar de Victoria. Al llegar le preguntan a Maite si ha visto al duende, ella
les dice que les ha dejado una nota. En ella, pone que les espera en el coche
de papa. Carlos le dice a su padre que hable flojito porque va asustar al
duende, Jacobo le pregunta que duende. El niño se lo señala, al mirar hacia el
coche Jacobo ve a un hombre bajito, vestido de verde intentando forzar la
puerta. Jacobo lo detiene. Los niños al ver como su padre detiene al que ellos
creen el duende se asustan y quieren volver con Laura. De vuelta en casa,
Jacobo le dice a Laura que quiere pasar más tiempo con los niños, ella le
responde que puede venir a verlos cuando quiera. Jacobo le dice que no quiere
verlos, quiere vivir con ellos.
Cuevas le explica a Laura que Martín lleva unas semanas saliendo
con una mujer (la que conoció en el cine) le ha preguntado por ella y Martín no
le ha querido contar nada. Lo cual le ha parecido muy extraño, así que ha
empezado a investigar. El caso, es cuando introduce el nombre de la chica en la
base de datos, el ordenador le deniega el acceso, todos los datos son
reservados. Laura preocupada se lo comenta a Martín, él se enfada y le dice,
que lo que le pasa es que no soporta verlo contento. Martín queda a comer con
Sandra en un restaurante, le hace saber que ha decido dejar a su marido. Martín
le pregunta si él ha tenido algo que ver, ella le dice que quizá no
directamente, pero algo sí. Esto no le hace ninguna gracia. Al día siguiente
Laura y Martín van al hotel a interrogar a las tenistas. Sandra ve de lejos a
Martín y le hace un gesto de saludo, el, la ignora. Ella se va corriendo hacia
el baño, Laura va tras ella, se la encuentra llorando. Sandra le comenta que ni
siquiera tiene un motivo original por el que llorar. Laura le dice que si la
cosa no funciona lo mejor es dejarlo. Sandra le responde que ya le gustaría,
pero está esperando un hijo suyo. Al saber esto Laura se disculpa con Martín,
le dice que a veces se comporta como policía, cuando solo tendría que hacer de
amiga. Le aconseja que si le gusta esa chica siga con ella, que siente la
cabeza y se tome la vida en serio. Martin le responde que sus consejos llegan
tarde, esa chica no es para él. Al día siguiente, Sandra llama a Martín y le
cuenta que está embarazada. Noticia que él no se toma nada bien.
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