* Reseña sin epoilers✅
Sandra, psicóloga de profesión y analista de datos en una gran empresa (Zafiro) sufre el desamor el 15 de febrero. Pasado un año, y tras ver un curioso documental del universo, se plantea una cuestión amorosa que, llevada a las cifras, a la estadística, su campo de trabajo, puede conseguir a través de la elaboración de un cuestionario la posibilidad de encontrar el amor en una app de móvil. Esta idea en principio descabellada, la lleva a convertirse en una delincuente accidental y a conocer a personas de vital importancia a lo largo de la historia que le ayudaran a llevar a cabo su plan, además de este reto profesional, tendrá que hacer frente a una bibliotecaria obsesionada con su trabajo que la persigue por donde ella se mueve.
La importancia del 15 de febrero, es una novela entretenida amena y divertida con situaciones cómicas sin rozar lo absurdo, como suele suceder en las historias de este género, en que la protagonista es acompañada por una madre no mucho más cuerda que la hija, un padre peculiar, un gato muy intuitivo, un novio un tanto rarito, y un socio amante de las magdalenas. Harán las delicias de los lectores, y que no se pierda el interés por seguir las andanzas de la protagonista. El libro aporta datos de psicología, del robo de datos por parte de multinacionales, algo que no vemos, pero que sabemos que está ahí.
Estructurado en 33 capítulos de extensión corta, narrado en tercera persona. A mí, personalmente, me gusta que este tipo de historias se narren en primera persona, y si se puede mostrar el punto de vista de la pareja protagonista, mejor que mejor.
En definitiva, La importancia del 15 de febrero, es una novela divertida y afable. Está catalogada de romántica, pero en algunos momentos más que romance, da la impresión de ser un libro de autoayuda.
6/10. |
Lecturas de verano. |
Sobre la autora:
Sofía Rhei (Madrid, 1978) es escritora. Ha publicado libros de poesía (Alicia Volátil), además de títulos infantiles (las series «El joven Moriarty», «Krippys», «Los hermanos Mozart») y juveniles (Flores de sombra, La calle Andersen). Como poeta ha obtenido el premio Javier Egea; como autora de libros infantiles, ha recibido la mención del Banco del Libro de Venezuela y el galardón Spirit of Dedication de la European Science Fiction Association, y su microficción ha sido nominada a los premios estadounidenses Rhysling y Dwarf Stars. Róndola (Minotauro, 2016) es su primera novela para adultos.
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